Carles Puigdemont como el "mejor horizonte", pero no como el único horizonte. Esta es la opinión del Assemblea Nacional Catalana (ANC), que sustenta que uno de los posibles escenarios de futuro en relación al candidato "también lo es aquel que genere consenso en la mayoría parlamentaria".

Así lo ha expresado el vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro, en una entrevista en el diario Ara, donde ha querido dejar claro que "no me corresponde a mí decirlo (quien tiene que ser el presidente)" y ha expuesto que si se produjera la situación, como ANC lo tendríamos que analizar.

Ahora bien. También ha subrayado que "se tiene que encontrar el encaje preciso" porque, según su opinión, "lo más importante es que tiene que ser asumido por las tres fuerzas políticas". Precisamente en este sentido, Alcoberro ha señalado que "de cara a los próximos años tenemos tres ramas de un mismo espacio que tienen que ser complementarias. Por una parte, un gobierno que gestione las competencias de la autonomía. Por otra, un proyecto republicano que se tiene que ir implementando. Y, finalmente, una mayoría en la calle construida a través de las entidades soberanistas".

Acuerdo contra el 155

El vicepresidente de la ANC ha puesto de relieve que la profundidad de la aplicación del 155 justo ahora empezamos a notarla, en relación a la intención del gobierno español de convertir el castellano en lengua vehicular en las escuelas catalanas, y ha propuesto "movilizarnos para mantener nuestro modelo". Para hacerlo, sustenta, "conviene que la mayoría republicana llegue a acuerdos y de manera inmediata".

Por todo ello, se ha lamentado de que "cualquier paso que hacemos se encontrará en frente los mecanismos represivos del Estado" y, por eso, ha expuesto que "lo que tiene que hacer el independentismo es organizar una estrategia en que haya una proporción razonable entre las conquistas que nos planteamos y las posibles pérdidas a causa de la represión".

El papel de la ANC será, a partir de ahora, "concienciar a la opinión pública europea y generar simpatías, como para el 1-O", así como "estudiar acciones pacíficas pero contundentes en defensa de los presos como hacer ayunos colectivos en lugares emblemáticos".