El Assemblea Nacional Catalana ha lamentado este jueves que no se tolere que el independentismo cuestione los fundamentos del Estado pero en cambio se permita la libertad de expresión en el fascismo en España.

La queja llega después de los incidentes del martes por la noche en la plaza de la Villa de Gracia, en Barcelona, para impedir una concentración anticapitalista. La ANC, con otras entidades independentistas, han hecho un llamamiento a la movilización cada martes, a las 20 h, en las plazas de cada barrio y cada pueblo para reivindicar los derechos fundamentales.

Pep Cruanyes, en representación de la Asamblea ha exigido a los diferentes responsables gubernamentales el máximo con respecto a los derechos y libertades civiles. "La crisis sanitaria no puede ser un argumento para impedir u obstaculizar el derecho a reunión y manifestación", ha manifestado. También ha denunciado la doble vara de medir que se utiliza en función de quien son los manifestantes y de su signo ideológico. "Esta doble vara de medir no está muy lejos de contener los elementos de una auténtica persecución política e ideológica", ha concluido.

ANC

Manifestaciones frustradas

Los Mossos d'Esquadra impidieron este martes por la tarde que se dieran con normalidad varias manifestaciones organizadas por la CUP en barrios de Barcelona para reclamar que la crisis económica no la paguen las clases sociales más bajas.

Las manifestaciones, no autorizadas, intentaban mantener una distancia de unos dos metros entre las decenas de manifestantes. En el barrio de Gracia, los agentes han pedido la disolución de la concentración y la identificación de los presentes. Según la policía, una chica se ha negado a identificarse y se ha resistido activamente con alguna vez e incluso un escupitajo, y ha sido arrestada por atentado a agentes de la autoridad. También ha habido movilizaciones en el Raval, Sant Andreu y Nou Barris, sin tantos incidentes.