La alcaldesa de Sitges, Aurora Carbonell (ERC), ha comparecido este jueves ante la prensa, dos semanas después de ser detenida por la Policía Nacional española en el marco de una operación anticorrupción. Carbonell, que fue esposada y trasladada a la comisaría de la Policía Nacional en Barcelona junto con concejales y técnicos del consistorio, pasó casi ocho horas detenida y ha denunciado haber recibido un trato "vejatorio" por parte de los agentes. "Lo que hemos pasado nos costará asimilar", ha lamentado. Concretamente, Carbonell ha criticado que los esposaran y les mantuvieran las esposas durante cuatro horas a pesar de que no opusieron resistencia en ningún momento y entregaron a la policía toda la documentación que pedían. "No había ningún motivo para que se nos llevaran de aquella manera, nos trataron como detenidos", ha remachado.

La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la policía española investiga la comisión de presuntos delitos de prevaricación, malversación y falsedad documental por parte del Ayuntamiento de Sitges en relación con la Taula del Tercer Sector Sitges-Garraf y una cooperativa de la población en la adjudicación de subvenciones y contratos menores en el periodo entre 2017 y 2022, coincidiendo con la segunda legislatura de Miquel Forns, de CiU (2015-2019) y la primera de Carbonell. Entre los otros investigados está Forns, el concejal Jaume Monasterio, el exconcejal Guillem Escolà, el secretario municipal y varios técnicos, así como el responsable de la Taula del Tercer Sector y su pareja. Al quedar en libertad, se preveía que declararan los días siguientes ante la jueza, pero la citación de los investigados se ha ido dilatando en el tiempo y ayer miércoles tuvieron conocimiento de que quedaba pospuesta sin fecha.

Carbonell lamenta que el operativo policial ha sido "un golpe muy duro"

Carbonell ha explicado que estaba haciendo una visita a varios espacios y fue al ayuntamiento a esperar la llegada de la policía, sobre la que había sido alertada. "Les dimos todo lo que nos pedían, y no nos negamos a absolutamente nada", ha relatado. Por este motivo le sorprendió el operativo y el trato recibido, especialmente por el hecho de que los esposaran. "Tengo hijos, tengo una madre de 86 años y no quiero que me vea esposada en la televisión por una cosa que ni siquiera sé", dijo a los agentes Carbonell. Más allá de su situación personal, la alcaldesa ha criticado que la operación ha sido un "golpe muy duro" que "ha hecho mucho daño a la política local, a la democracia, a los funcionarios y a la institución".

Carbonell ha insistido en su inocencia y ha garantizado que en el Ayuntamiento "se siguen todos los protocolos" a la hora de conceder subvenciones a las entidades "No he hecho nada malo", ha dicho, preguntada por si considera que acabará exculpada. Con todo, ha anunciado la convocatoria de un pleno extraordinario para el próximo 19 de julio para acordar la creación de una comisión informativa de carácter especial para aclarar la relación con la Taula del Tercer Sector. "Lo hacemos con máxima voluntad de transparencia y colaboración", ha aseverado Carbonell, que ha recordado que "hace más de un año y medio" que el consistorio encargó una auditoría interna sobre estos hechos a petición de la interventora municipal.