En su último discurso como presidente del PPCXavier Garcia Albiol no ha soltado su gran bandera: la del artículo 155 de la Constitución española. "Cuando nadie hablaba de aplicar el 155, desde el PPC defendimos que se tenía que aplicar de manera inmediata, sin complejos", ha reivindicado el presidente saliente, antes de pasar al testigo a Alejandro Fernández. Ha reprochado que otros sólo dieron apoyo "cuando las encuestas mostraban que es lo que querían la inmensa mayoría de catalanes y españoles".

En su intervención este sábado en el X Congreso del PPC, celebrado en Sitges, ha lamentado incluso que "sólo" se haya utilizado el artículo 155 para convocar elecciones. Según él, se tendría que haber ido más lejos, entrando en los medios públicos, que ha descrito como "aparatos de propaganda pagados por todos". También para saber "qué está pasando con la educación" en Catalunya. "Sabíamos que las elecciones no eran el mejor escenario", ha dicho.

El presidente saliente de los populares catalanes se ha felicitado por "haber sobrevivido a la etapa de fanatismo totalitario en Catalunya", en referencia al independentismo. A pesar de todo, ha admitido que "los resultados no acompañaron el trabajo realizado, por injusto que sea". Y es por eso que ha defendido la necesidad de dar un "paso al lado" para dejar paso a un nuevo liderazgo. A partir de ahora se centrará en la campaña de las elecciones municipales en Badalona, donde aspira a recuperar la alcaldía.

"Dimos la cara en los momentos más difíciles que ha vivido la democracia en nuestro país", ha sostenido Xavier Garcia Albiol, que ha asegurado que "hicimos lo que creíamos mejor para Catalunya y España". En esta línea, ha subrayado que ha antepuesto el interés general a los intereses electoralistas.

Aunque ha admitido que quizás han cometido "errores", ha afirmado que "han sido muchos más los aciertos". El alcaldable en Badalona ha justificado que les ha "tocado vivir la situación más convulsa y excepcionales", que han estado "testigos de acontecimientos imposibles de imaginar en ninguna democracia europea y han puesto en jaque el Estado de derecho".