Desde que el 19 de junio Ciudadanos perdió toda la representación en el Parlamento de Andalucía, donde durante tres años y medio estuvo en el gobierno e incluso asumió la vicepresidencia, el futuro de Inés Arrimadas al frente del partido naranja se ha puesto en duda y ella ha ido repitiendo a diestro y siniestro que dependerá de lo que opine la militancia, que cada vez tiene menos miembros. En Andalucía, después del fracaso electoral que propició la mayoría absoluta del popular Juanma Moreno, la gran mayoría de dirigentes abandonaron el partido y aunque esta no ha sido la estrategia de Arrimadas, su futuro tampoco está asegurado. Había quien pensaba que, como hizo Albert Rivera después de su patacazo en las elecciones generales de noviembre de 2019, la catalana dimitiria, pero se ha limitado a confirmar que su futuro dependerá de lo que digan las bases.

La entrevista de este fin de semana en Europa Press es la más reciente de las numerosas ocasiones en que Arrimadas habla de un proceso de refundación del partido en que todo está para decidir, incluso su liderazgo o el proyecto del partido en sí: "Todo se puede renovar", decía entonces. En este sentido, fuentes del partido aseguran en ElDiario.es que no se marchará, y todavía menos antes de las elecciones municipales de mayo del 2023, probablemente su última oportunidad de un pequeña remontada: la naranja Begoña Villacís es vicealcaldesa de Madrid, por ejemplo.

Renovación total de Ciudadanos

Según recoge este diario, las personas próximas a la dirigente aseguran que con estos mensajes crípticos Arrimadas no está preparando el terreno para su adiós si no está poniendo encima de la mesa algo que para ellos es obvio: los militantes decidirán si la Ejecutiva se mantiene o, en cambio, se tiene que renovar. Desde el patacazo andaluz Arrimadas asegura que lo más fácil habría sido terminar, abandonar el barco, pero que se ha negado porque algunos de sus compañeros en la reunión posterior a las elecciones les pedían que no se marcharan. En este sentido, Arrimadas aseguró que el PP le ha ofrecido "todo", pero que decidió rechazarlo.

¿Quién puede sustituir Arrimadas?

Después de que dos políticos que empezaron su carrera en el Parlamento de Catalunya hayan hundido su partido, parece que el futuro en caso de que Arrimadas desaparezca de la plana mayor pasaría por Madrid. Una de las opciones es la misma Begoña Villacís, pero ella de momento asegura que sigue concentrada en la política de la capital española y en las elecciones de mayo del 2023, o Edmundo Bal, una de las caras más visibles de los naranjas al ser su portavoz. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que él se presentó como candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid y su partido no obtuvo representación.