El presidente español, Pedro Sánchez, ha sido abucheado este miércoles en Roma, donde ha viajado para entrevistarse con la primera ministra italiana, la ultra Giorgia Meloni. Los hechos han sucedido cuando el mandatario español se ha encontrado con un grupo de estudiantes españoles a la salida del palacio Chigi, sede de la primera ministra, que le han gritado "fuera, fuera" y "que te vote Txapote", en alusión al etarra que fue trasladado a una prisión vasca. El abucheo ha tenido lugar a pocos metros de donde ha pasado el coche de Sánchez, pero no se ha producido ningún incidente, y la policía italiana no ha intervenido.

Era la primera vez que Pedro Sánchez y Giorgia Meloni se veían cara a cara desde que la ultraderechista es la primera ministra italiana, y la reunión bilateral de este martes en Roma se ha saldado con una exhibición de cordialidad y sintonía, aunque los dos forman parte de familias políticas situadas en polos opuestos y defienden proyectos políticos antagónicos. España e Italia son aliados estratégicos en el arco mediterráneo aunque, en la actualidad, están en las antípodas políticas. De aquí que Sánchez y Meloni hayan hecho un ejercicio de diplomacia y equilibrismo evitando confrontar modelos y, a la vez, subrayando los acuerdos y los consensos que necesitan de cara a la presidencia europea de turno que asumirá España durante el segundo semestre de este año.

Hace menos de un mes que Pedro Sánchez alertaba, desde el Congreso de los Diputados, de los peligros que supone el auge de Vox en la política española durante la moción de censura de Ramón Tamames. De hecho es habitual que realice advertencias de este tipo en las sesiones de control. Pero hoy era el día para obviarlo con vistas al reto europeo que tiene Sánchez. En este sentido, la Moncloa aterrizó en Roma con la idea de buscar consenso y no subrayar diferencias entre uno y la otra y la comparecencia conjunta de este miércoles lo ha corroborado a rajatabla.

"Tenemos una relación estratégica fundamental (...) Compartimos objetivos muy alineados", ha subrayado el presidente español desde el Palacio romano de Chigi, donde lo han recibido con honores. "Italia y España tienen que hablar porque comparten puntos de vista y tenemos muchas convergencias (...) Es muy importante ver el estado de la sintonía en nuestros países", ha replicado con elegancia la primera ministra italiana.