Eximente completa de legítima defensa. La Audiencia de Barcelona ha absuelto a Francesc Xavier, a quien la Fiscalía pedía 4 años de prisión por haber dado un puñetazo a la cara de un exlegionario que lo asediaba para llevar una estelada en el cuello, después de la celebración de la Diada de 2020 en Vilanova i la Geltrú. La Fiscalía pedía que solo se le aplicara la legítima defensa parcial, ya que la agresión fue grave, y provocó la pérdida de la visión del ojo izquierdo. El tribunal, sin embargo, comparte la tesis de la defensa, ejercida por Xavier Monge, de Alerta Solidaria, que Francesc Xavier actuó para defenderse, después de que el otro acusado, Adolfo, lo asedias y le diera un golpe en la espalda. "La acción de defensa es proporcional porque no se usa instrumento peligroso y porque Francesc Xavier da el puñetazo de forma instintiva; se gira y no puede prever que le hará daño en el ojo izquierdo ni que se romperán las gafas", razona la sección 6.ª de la Audiencia en la sentencia, a la cual ha tenido acceso ElNacional.cat.

Por el contrario, el tribunal condena Adolfo a 2 años de prisión por un delito de amenazas con la agravante de odio a la ideología independentista, además de una multa de 360 euros por un delito menos grave de maltrato de obra, y que indemnice a Francesc Xavier, con 1.000 euros, y no se le puede acercar a una distancia inferior a 1.000 metros durante dos años. Francesc Xavier había depositado en el juzgado 103.573 euros para indemnizar al exlegionario de la grave lesión sufrida, pero ahora este dinero, que recogió con apoyos, se le tendrá que devolver. La Caixa de Solidaridad ha colaborado económicamente en la defensa jurídica de Xavier.

Más fiabilidad

El juicio se celebró el 9 de junio pasado y Francesc Xavier admitió al tribunal que dio el puñetazo "de forma instintiva y por miedo" porque se marchaba a su casa con su mujer, a la cual tranquilizaba, según declararon algunos testigos en el juicio, antes de reaccionar contra el asediador. El tribunal -formado por los magistrados José Manuel del Amo, presidente y ponente, Isabel Cámara y Javier Lanzos- razona, en la resolución, que el hecho de que Francesc Xavier haya admitido que dio un puñetazo a su asediador "le da más fiabilidad y más crédito que a quien lo niega". En el juicio, Adolfo negó cualquier acoso y aseguró que salió a comprar con unas gafas y un sombrero, y llevaba una camiseta de la Legión. Agentes de la Policía Local, por el contrario, cuando lo interrogaron, dijeron que hizo ostentación de ser legionario y de ponerse en problemas.

Protección del independentismo

El tribunal de la sección 6.ª es estricto con la sanción que impone a Adolfo, al cuál la Fiscalía también pedía aplicar la agravante por discriminación ideológica. "Es evidente que el acusado, en lugar de dejar que Francesc Xavier ejerciera de forma simbólica su derecho de expresar libremente su ideología a través del hecho pacífico de llevar la bandera estelada, le quiso coartar en su libertad motivada por su aversión a su sentimiento independentista", manifiesta el tribunal y añade: "Así su conducta de acoso que se convirtió en agresión estuvo guiada por su propósito de intimidar a quien chocaba con su ideología." La Audiencia de Barcelona, además, afirma que "la ideología independentista entra en el marco constitucional y tiene que recibir tutela penal, como el resto".

Respuesta de la Fiscalía

Xavier Monge abogado del encausado, en declaraciones en ElNacional.cat, ha hecho una valoración "muy positiva de la sentencia" porque sostiene que "el tribunal ha adoptado los argumentos que la defensa expuso en el juicio y que entiende que Xavier actuó en legítima defensa ante una agresión por la espalda por parte del exlegionario, y que además la agresión estaba motivada por el odio de este al independentismo". Y añade: "Teníamos claro que Xavier solo se defendió, pero también que la eximente completa de legítima defensa es poco habitual, y eso era un reto. Además, el agresor ha sido condenado por el golpe y por amenazas con la agravante de discriminación por razón ideológica."

Monge ha manifestado que "no se entendería que la Fiscalía de delitos de Odio presentara recurso contra la absolución de Xavier", del cual asegura que "a pesar de ser la víctima, es quien ha recibido un trato más duro por parte de la acusación pública".