Las universidades públicas catalanas han vivido una jornada con una baja actividad académica este viernes después de que la mayoría de estudiantes hayan optado por participar en las movilizaciones previstas.

La mayoría de profesores ya habían avanzado o pospuesto las clases en previsión del elevado seguimiento de las protestas.

En la Universitat de Girona se había convocado una huelga de dos horas, de 12.30 h a 14.30 h, pero sin embargo la mayoría de clases de esta mañana no se han dado. Por otro lado los trabajadores que han llegado al centro han podido hacer sus tareas con normalidad. Desde el rectorado también han apuntado que parte del personal ha llegado tarde o no ha llegado por los múltiples cortes en las carreteras gerundenses.

En la Universitat Autònoma de Barcelona se ha vivido una mañana de calma después de que los alumnos hayan secundado el llamamiento del Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes, que les convocaba a manifestarse en Barcelona.

La Universitat de Barcelona también se ha añadido a la huelga. Las diversas facultades de Barcelona han estado más vacías de lo habitual después de que los sindicatos de estudiantes hayan llamado a añadirse a las movilizaciones de la calle.

El equipo de gobierno de la Universitat de Barcelona ha decidido mantener la programación de actividades académicas. Ahora bien, para asegurar el libre ejercicio del derecho a huelga y evitar afectaciones negativas fruto de posibles incidencias en la movilidad, había pedido al profesorado que se aplazaran todas las actividades académicas evaluables o que requirieran asistencia obligatoria.

El colectivo Unis per la República también había convocado a los estudiantes a no ir a clase y a salir a la calle.