Intersindical Valenciana ha convocado hoy una concentración a las puertas del Palacio de Justicia de Valencia, para expresar su rechazo a las sentencias que ha dictado el Tribunal Superior de Justicia contrarias al decreto de usos lingüísticos en la Administración Valenciana y al decreto de plurilingüismo para el sistema educativo valenciano. Unas sentencias que, desde el punto de vista del sindicato, responden más a valoraciones políticas que no jurídicas y sólo pueden ser calificadas de antivalencianas, al ir, incluso, en contra de la jurisprudencia del TSJCV mismo, del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional.

"Las sentencias mismas del TSJCV, dictadas desde 2004, admiten que el nombre de la lengua puede llamarse catalán o valenciano y que eso está de acuerdo con la legislación; además, se ha omitido la sentencia 75/1997, de 21 de abril, de Tribunal Constitucional. Unos hechos que ponen en evidencia la falta de rigor jurídico de las cuatro sentencias sobre el decreto de usos lingüísticos. Sobre este asunto, los servicios jurídicos del Sindicato están estudiando la presentación de recursos en contra de las cuatro sentencias"

"Objetivos políticos y no educativos"

Respecto del decreto de plurilingüismo, añade al sindicato, "consideramos positiva la providencia del Tribunal Supremo que pone fin a la vía judicial en contra de un decreto ya derogado y que deja en evidencia en el TSJCV y a determinadas entidades obstinadas al mantener la vía jurídica abierta cuando la Generalitat misma lo había derogado. Otro ejemplo que manifiesta como los recursos presentados por instituciones y entidades tenían una finalidad política, en ningún caso pedagógica ni educativa ni respetuosa con los derechos lingüísticos del alumnado, al ser contrarias al desarrollo de la competencia comunicativa en las dos lenguas oficiales y, como mínimo, en una lengua extranjera"