La ampliación del aeropuerto del Prat se ha convertido en una competición entre los gobiernos catalán y español a ver el cual se pone menos de acuerdo con el otro. Pero también es una pugna para comprobar cuál de los dos ejecutivos de coalición manifiesta más desacuerdo interno. ¿La próxima reunión podría ser más o menos de esta manera?

- ¡Hola!

- Empezamos mal porque nos gusta más decir salud.

- Vamos al grano. Si queréis alguna inversión, adiós a la Ricarda. El problema es que ahora no se nos ocurre nada que rime con Ricarda y que signifique desaparición...

- ¿Nos importa una mierda lo que suceda con la Ricarda?

- Bueno, es un poquito como aquello de Mecano rimando "Jamón de York" con "Nueva York", pero el espíritu de la frase cuenta con nuestro consenso.

- ¿Y no hay ninguna otra opción?

- No. O adiós Ricarda o aparcamos el proyecto.

- Como hablamos de aeropuerto preferimos decir que el proyecto aterriza.

- Nos gusta más "nos ponéis entre la Ricarda y la pared".

- La culpa es vuestra.

- No, vuestra.

- ¿Por lo tanto, en culparnos los unos a los otros, también estamos de acuerdo, verdad?

- Totalmente.

- Pero, ¿habláis como gobierno o como partido?

- ¿Y vosotros?

- Depende.

- También estamos de acuerdo en el depende. Luego, dentro de nuestro gobierno de coalición, estamos en total desacuerdo.

- Nosotros, internamente, no estamos de acuerdo ni en cómo estar en desacuerdo.

- Nuestro gobierno de coalición, en cambio, está en contra de estar de acuerdo en el desacuerdo.

- Nosotros como gobierno estamos en contra de estar en contra, pero los partidos que lo forman están a favor de estar en contra.

- ¿Por lo tanto, estáis a favor?

- ¿De qué? ¿De estar en contra?

- No, de estar en contra de estar en contra de estar en contra.

- ¿Nos lo preguntáis como gobierno, como partido, o a título individual?

- ¿Sabéis qué sucede? Que necesitamos una anécdota para tener suficientes argumentos como para desviar la atención.

- En eso volvemos a estar de acuerdo. Empezamos a preocuparnos. ¡A ver si al final no estaremos de acuerdo ni en estar en desacuerdo!

- ¿Y si hacemos un tuit?

- Vosotros sois más de chantajes.

- Y vosotros de ir a manis.

- Y vosotros de ir a visitar a la zona.

- ¿Se puede visitar la zona?

- En avión.

- Pues hemos hablado con la Ricarda.

- ¿Y qué?

- Muy mareada. No está acostumbrada.

- ¿Irá a la mesa?

- ¿Quién, la Ricarda?

- No, la Ramoneta.

- Le hemos dicho que ahora le llamaremos Ricarda Josep Tarradellas.

- A nosotros nos gusta más DORA, que se creen que quiere decir Documento de Regulación Aeroportuaria y realmente es la exploradora.

- Dora, dora, dora, té necesitooo dooora...

- ¡Muy bonita! ¿Era de Jesulín de Ubrique, verdad?

- Pero nos gusta más aquella otra del "Aserejé Hub de Hub...".

- Queréis que os cantemos la de los Mosqueperros. Con percusión.

- Claaaaaro, 1.700 millones de golpecitos donde ya os diremos.

- Pues ya podemos pactar las declaraciones. Vosotros diréis que nosotros siempre estamos con el "no en todo" que nos hace pequeños y que nos hemos dejado perder nuevamente una lluvia de millones. Concretamente Dorada, como la costa del propio nombre, que está por allí cerca más al sur.

- Pues vosotros diréis que era una maniobra nuestra para que fuera imposible aceptarla y acabar invirtiendo, como siempre, en Barajas.

- Vaya, ahora no se nos ocurre nada que rime Barajas con alguna cosa que signifique espolio...

- Donde nunca están de rebajas es siempre en Barajas.

- ¡Estamos completamente de acuerdo!