Croacia hace historia y se clasifica por primera vez para la final de un Mundial gracias a un gol de Mandzukic en la prórroga (2-1). La selección de Rakitic ha eliminado a Inglaterra y se enfrentará a Francia, que ganó a Bélgica en la otra semifinal, para convertirse en la mejor selección del mundo en Rusia. Los de Southgate dicen adiós a su sueño y se despedirán de la Copa del Mundo del 2018 con el partido por el tercero y cuarto lugar.

Trippier honra a Beckham

El Mundial es un escaparate para los futbolistas que lo disputan, tanto para los que se consagran como para los que se dan a conocer. Rakitic, Modric, Kane y Dele Alli han formado parte del primer grupo mientras otros como Rebic, Maguire, Pickford o Henderson han utilizado el torneo para hacer llegar su nombre a todas partes. Colectivamente, disputar una semifinal de una Copa del Mundo tiene muchos alicientes; individualmente, sin embargo, la competición internacional más importante también ofrece muchos estímulos a sus participantes.

Hoy, Trippier ha sido el que más claro lo ha tenido. Por su influencia en el juego y en el resultado. Cuando sólo se habían disputado cinco minutos, el lateral ha fusilado a Subasic con un lanzamiento de falta inmaculado contra el cual el portero croata no ha podido hacer nada. El futbolista del Tottenham se ha vestido de David Beckham (el célebre exfutbolista era el único jugador inglés que había marcado algun tanto de falta directa durante un Mundial) y ha trastocado los planes de Croacia. 0-1. Como en todas eliminatorias anteriores, los de Dalic tenían que ir a remolque.

El tanto de Trippier ha sido la llovizna previa a una tormenta ofensiva que ha puesto contra las cuerdas a los balcánicos. Southgate ha confiado en el once de gala que ha vuelto a hacer sonreír a su país 28 años después y este ha vuelto a responder. Rakitic y Modric se han fundido entre el poblado medio del campo británico. Lejos de conformarse con el resultado y fiel a lo que la ha hecho volver a ser grande, Inglaterra ha seguido buscando el segundo gol. Subasic y la falta de acierto de Kane, que ha fallado algunas ocasiones que no acostumbra a perdonar, han evitado que los croatas tuvieran que tirar la toalla antes de llegar al descanso.

Croacia nunca se rinde

No obstante, Rusia está siendo escenario de uno de los Mundiales más imprevisibles de los últimos tiempos y el partido de hoy ha sido la clara representación de lo que se ha vivido durante el último mes. Y es que el partido se ha girado como un calcetín: Croacia ha necesitado un cuarto de hora de reanudación para conseguir mejorar las sensaciones, pero una vez lo ha hecho los ingleses han perdido su empuje. Su superioridad se ha difuminado y Pickford ha empezado a ver cómo sus rivales se acercaban a la portería que defendía.

Perisic ha sido el encargado de premiar la insistencia balcánica y ha igualado el duelo. El delantero del Inter de Milán se ha anticipado en un centro de Vrsaljko desde la derecha, ha colocado la punta del pie y ha caducado el resultado que había mostrado el marcador del Estadio Luzhnikí durante más de sesenta minutos. El gol ha animado a unos y ha deprimido a los otros. Los de Dalic se han enterado de ello, han olido la sangre y han intentado hacer más grande la herida. Southgate no sabía qué hacer para que la reacción croata no acabara con el sueño de su país. El mismo Perisic ha tenido a sus botas sortear la prórroga, pero su disparo se ha estrellado contra el palo.

No habrá sido la selección más vistosa, pero Croacia ha demostrado una competitividad ejemplar durante el Mundial. Más, incloyso, que la histórica generación de 1998 de Prosinecki y compañía. El tiempo extra ha estado completamente equilibrado. El atrevimiento ha perdido la partida contra la especulación. En competiciones entre selecciones, el miedo a perder siempre pesa más que las ganas de ganar. Inglaterra, bastante cansada, ha puesto a prueba a Subasic en alguna ocasión puntual, mientras que Pickford ha podido relajarse después de una segunda mitad de mucha exigencia.

Cuando todo parecía indicar que el partido se decidiría en los penaltis, Mandzukic lo ha evitado. El '17' ha recogido una buena asistencia con la cabeza de Perisic y ha marcado el segundo gol de su equipo con un remate cruzado. La fuerza de los más de cuatro millones de habitantes croatas se ha trasladado al muslo izquierdo del delantero de la Juventus y la pelota se ha introducido en la portería inglesa todo teledirigiendo, por primera vez en la historia de Croacia, a su combinado nacional a la final de una Copa del Mundo. Francia sigue siendo la gran favorita a llevarse el Mundial de Rusia, pero los de Dalic le han enviado un mensaje claro: ganarles no será algo sencillo.