Toyota ha ampliado la gama de su SUV compacto C-HR con una nueva variante 100 % eléctrica que introduce una mejora significativa en términos de rendimiento y tracción. Esta nueva versión, equipada con dos motores eléctricos y tracción total, se posiciona como la más potente y avanzada tecnológicamente dentro de la familia C-HR, consolidando su salto definitivo hacia la electrificación sin perder su carácter dinámico ni su enfoque práctico.
El nuevo C-HR eléctrico con tracción a las cuatro ruedas incorpora un sistema de doble motorización que permite alcanzar una potencia combinada de 343 CV. Esta cifra representa un aumento notable frente a las versiones anteriores y sitúa al modelo en un terreno reservado hasta ahora para propuestas de corte claramente deportivo. La configuración mecánica está asociada a una batería de 77 kWh de capacidad útil, la mayor disponible en la gama, lo que permite mantener una autonomía estimada cercana a los 600 kilómetros, incluso en esta versión de mayores prestaciones.
Este incremento de potencia va acompañado de una mejora sustancial en el comportamiento dinámico del vehículo. La tracción integral no solo proporciona un mejor reparto de par entre ambos ejes, sino que también refuerza la seguridad en condiciones de baja adherencia y mejora la estabilidad en conducción exigente. Cabe destacar que, pese a su orientación más prestacional, el modelo mantiene unas cifras de eficiencia notables gracias a la optimización del sistema eléctrico y a la gestión inteligente de los motores.
Dos configuraciones eléctricas para diferentes perfiles de uso
La nueva oferta eléctrica del C-HR se articula en torno a dos versiones principales. La más accesible recurre a un único motor eléctrico de 224 CV ubicado en el eje delantero, con la misma batería de 77 kWh que la variante de tracción total. Esta configuración permite mantener una autonomía prácticamente idéntica, alrededor de 600 kilómetros, con un enfoque más equilibrado entre prestaciones y eficiencia. Esta versión está especialmente pensada para quienes priorizan la autonomía y la conducción urbana o interurbana.
Por otro lado, la variante con doble motorización y tracción total está orientada a quienes buscan un rendimiento superior y una mayor polivalencia. Su sistema de tracción eléctrica a las cuatro ruedas permite una aceleración más contundente desde parado y una respuesta más directa en curvas o superficies deslizantes, ampliando las capacidades del modelo más allá del uso urbano.
En ambos casos, el sistema de recarga admite potencias de hasta 150 kW en corriente continua, lo que permite recuperar buena parte de la batería en tiempos reducidos. También se ofrece carga en alterna de 11 kW o 22 kW, según versión. A nivel de diseño, dimensiones y habitabilidad, el C-HR eléctrico conserva el planteamiento habitual del modelo, sin renunciar a un interior bien aprovechado y un maletero de capacidad suficiente.
Con esta ampliación de gama, Toyota refuerza su apuesta por la electrificación con un modelo que combina autonomía, potencia y versatilidad, alineándose con las exigencias de un mercado cada vez más competitivo en el segmento de los SUV eléctricos compactos.