Ucrania vive una doble guerra. Además de esquivar los bombardeos rusos, el país tiene que hacer frente a un invierno frío, a oscuras y sin calefacción en muchos puntos del país. Precisamente por este motivo, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha expuesto que los generadores son tan importantes como las armas para ayudar en Ucrania a sobrevivir al terror energético de Vladímir Putin, el presidente ruso. Lo ha manifestado en una conferencia de emergencia en París, convocado para coordinar la infraestructura y la ayuda humanitaria al país durante los próximos cuatro meses.

Se prometió un total de 1.050 millones de euros en ayuda financiera y en especie, pero el presidente ucraniano dijo que, además de sobrevivir en invierno, el país necesitaba 1.500 millones de euros adicionales para restaurar el daño en la red de energía.

El objetivo de la conferencia es establecer un mecanismo de coordinación internacional para garantizar que Ucrania obtenga la combinación correcta de generadores, transformadores, equipos para la restauración de redes de alto voltaje y turbinas de gas.

"Haremos todo el posible para contrarrestar el apagón y el terror energético. La mayoría de nuestras plantas de energía están estropeadas o destruidas por los bombardeos", ha dicho Zelenski en un discurso ante la conferencia por enlace de vídeo.

"Cada día nuestros ingenieros tienen que desconectar millones de ucranianos para estas reparaciones. Actualmente hay 12 millones. Y cada día esperamos nuevos ataques rusos. Por eso los generadores se han vuelto tan importantes como las armaduras para proteger la población". Hay que recordar que las olas de ataques rusos sobre la red eléctrica del país han destruido el 50% de la red.

Objetivo: tres horas de la electricidad al día

Los expertos en energía dicen que la tarea clave para Ucrania no es evitar los apagones, sino garantizar que cada día todos los vecinos reciban al menos tres horas de electricidad, cosa que requiere una distribución complicada de la red.

La conferencia de inspiración francesa está diseñada para coordinar la ayuda humanitaria en Ucrania y cuenta con la asistencia de más de 40 países y 30 organismos multilaterales.

La ayuda prometida incluía generadores y transformadores de energía, además de asistencia con alimentos, agua, salud, transporte y reconstrucción. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció la financiación para la compra de 30 millones de bombillas de bajo consumo que Ucrania había solicitado para reducir la presión sobre su red eléctrica.

La reunión también pondrá en marcha un sistema para coordinar la ayuda internacional para el invierno para que los donantes no se dupliquen. Una plataforma basada a la web permitirá en Ucrania enumerar sus necesidades de ayuda civil y permitirá a los donantes mostrar lo que proporcionarán en respuesta.

 

Imagen principal: una mujer saca las protecciones de las ventanas para evitar que se rompan por los bombardeos. El piso está iluminado por luz desconectada, durante un apagón en la capital / Efe