La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se reunirá este domingo en Escocia con su homólogo de los Estados Unidos, Donald Trump, en un momento clave para las relaciones comerciales entre Bruselas y Washington. El encuentro tendrá lugar pocos días después de la fecha límite marcada por el mismo mandatario norteamericano, que ha amenazado con imponer, a partir del 1 de agosto, aranceles generalizados sobre varios productos europeos si no se llega antes a un acuerdo satisfactorio. Von der Leyen ha confirmado la reunión después de una "buena" conversación telefónica con Trump, según ha detallado ella misma a través de una publicación en la red social X, dónde también ha adelantado que el objetivo del encuentro será abordar las "relaciones comerciales transatlánticas y como reforzarlas". El viaje de la presidenta de la Comisión busca desactivar la nueva amenaza arancelaria de la Casa Blanca y evitar la escalada de un conflicto comercial con consecuencias potencialmente graves para varios sectores de la economía europea.
Por su parte, Trump ha reiterado este viernes que la Unión Europea tiene una "oportunidad muy buena" para cerrar un acuerdo comercial con los Estados Unidos antes de que expire el ultimátum del 1 de agosto, a pesar de advertir que las probabilidades reales de llegar podrían ser "de un 50% o menos". En una declaración en la prensa previa a su desplazamiento a Escocia, el presidente norteamericano ha subrayado la importancia económica de la negociación, insistiendo en que "hay mucho dinero de por medio. Mucho dinero". Trump también ha vuelto a cargar contra los aranceles europeos, especialmente los del 30% en determinados productos, que considera inaceptables para el interés comercial del país que preside. Por su parte, el portavoz comunitario de Comercio, Olof Gill, afirmó el jueves que la posibilidad de un acuerdo está "al alcance", destacando los "intensos contactos" que mantienen Bruselas y Washington tanto en el ámbito técnico como político en la carrera contrarreloj para evitar la escalada arancelaria.
La amenaza de un nuevo capítulo en la guerra arancelaria transatlántica ha obligado a Bruselas a prepararse para una eventual respuesta. Después de que el 13 de julio Trump fijara un ultimátum para aplicar aranceles generalizados en las exportaciones europeas a partir del 1 de agosto, Von der Leyen optó por congelar provisionalmente las medidas de represalia, dejando una puerta abierta a la negociación. No obstante, este jueves la Unión Europea confirmaba que ya ha completado los procedimientos para activar contramedidas sobre un volumen de hasta 93.000 millones de euros en importaciones procedentes de los Estados Unidos. El ejecutivo comunitario ha diseñado una respuesta gradual: prevé una primera fase de recargos a partir del 7 de agosto y dos tandas adicionales en septiembre del 2025 y en febrero del 2026, en función del resultado de las negociaciones con Trump.