La canciller alemana, Angela Merkel, ignora los intentos del presidente norteamericano, Donald Trump, de sacar 300.000 millones de libras esterlinas de Alemania porque considera que debe contribuciones a la OTAN. Parece ser que Trump había imprimido una factura en la que pedía la suma de dinero para cubrir las contribuciones no pagadas de Alemania por la defensa.

La factura se presentó durante la visita de la canciller en Washington, y se ha recibido con muchas críticas por parte de funcionarios alemanes y la propia OTAN. El año 2014 los países de la OTAN se comprometieron a gastar el 2% de su PIB en defensa, pero el año 2002 el predecesor de Merkel, Gerhard Schröder, anunció que gastaría más.

Según informes, Trump pidió a sus asesores que calcularan cuál era el gasto alemán de los últimos 12 años, que aparentemente había caído por debajo del 2%, después de añadir los intereses la cifra final era la de 300.000 millones de libras. El diario Times citó a un ministro del gobierno alemán, que de forma anónima, calificaba la medida de indignante: "El concepto de esta factura es intimidar la otra parte, pero la canciller se lo ha tomado con calma y no responderá a estas provocaciones" afirmaba.