El rey de Inglaterra, Carlos III, ha ingresado este viernes en un hospital de Londres para ser intervenido de un engrandecimiento de la próstata, según ha informado al Palau de Buckingham en un comunicado. "El rey ha sido ingresado esta mañana en un hospital de Londres por un tratamiento planificado. Su Majestad quiere agradecer a todos aquellos que han enviado sus buenos deseos durante la última semana y está encantando conocer que su diagnóstico está teniendo un impacto positivo en la concienciación ciudadana sobre la salud", han señalado.

En torno a las 10:00 horas, varios medios británicos han difundido imágenes del monarca saliente de su residencia de Clarence House, y entrante acompañado de la reina Camila en la clínica privada, London Clinic, situado en el centro de la capital británica. Precisamente, es la misma clínica donde su joven, Kate Middleton, se recupera de una cirugía abdominal a la cual se sometió hace una semana. Carlos III llegó a Londres la noche del jueves desde su residencia en Sandringham, en el este de Inglaterra.

Intervención programada

El pasado 17 de enero, Buckingham ya informó de que Carlos III se sometería a un tratamiento esta semana por un engrandecimiento de próstata "benigno", sin dar más detalles sobre la fecha, y donde señalaron que se trataba de un procedimiento "común para miles de hombres cada año". Aseguraban que la condición de Carlos III era "benigna". El palacio agregó que "los compromisos públicos del rey —de 75 años— se pospondrán durante un breve periodo de recuperación". Carlos III ha manifestado su deseo de compartir su afección con la ciudadanía para animar a otros hombres a someterse a revisiones, según el entorno del monarca. Un día después del anuncio, la reina Camila dijo en un acto público que su marido se encuentra bien y que está "deseoso de volver al trabajo".

Ingreso de Kate Middleton

La princesa de Gales, Kate Middleton, se ha sometido a una operación abdominal que ha hecho saltar todas las alarmas sobre su estado de salud. Se especula con la posibilidad de que la intervención no fuera del todo exitosa, mientras que otras fuentes apuntan que las dos semanas de reposo absoluto que tendrá que pasar en el hospital indican que su enfermedad sería más grave del esperado. Middleton tenía que estar ingresada de 10 a 14 días en el hospital London Clinic y hasta Semana Santa no podría recuperar la agenda pública.

Ante la avalancha de especulaciones sobre la operación, la casa real británica, ha salido al paso y ha asegurado que no se trataba de ninguna operación relacionada con cáncer. Según ha apuntado la periodista Pilar Vidal en Espejo Público, se habría sometido a una histerectomía, es decir, una operación para extirpar el útero y el cuello uterino, y a veces, también los ovarios y las trompas de Falopio.