Vladímir Putin ha rechazado este viernes un posible cambio de estrategia en el campo de batalla en Ucrania, a pesar de la exitosa contraofensiva ucraniana en la región oriental de Khàrkiv. "El plan de la operación militar especial no requiere ningún cambio", ha afirmado al presidente ruso en una rueda de prensa al acabar la comisión de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS).
Después de que las tropas rusas se retiraran de Khàrkiv hace una semana, Putin ha subrayado que el Estado Mayor del Ejército ruso toma decisiones operativas teniendo en cuenta aquello que es más importante para el país. En este sentido, el presidente ruso ha señalado que "el principal objetivo es la liberación de todo el territorio de Dondbás", cosa que según Putin está pasando "a pesar de los intentos de contraofensiva" de los ucranianos. "Nuestra operación ofensiva en Donbàs no ceja. Continúa a un ritmo bajo, el ejército ruso ocupa nuevos y nuevos territorios", ha recalcado Putin. Además, también ha añadido que Rusia no combate con su ejército "completo", sino que sólo ha utilizado "una parte", la cual incluye a los soldados profesionales, ya que no tienen "ninguna prisa" para poner fin al conflicto.
Con respecto a la "activa contraofensiva ucraniana", el presidente ruso ha asegurado que ya se verá "cómo se desarrolla y en qué acaba". Precisamente este repliegue de las tropas rusas en Khàrkiv despertó críticas hacia la campaña militar rusa y, hasta y todos, algunos políticos empezaron a hablar de la posibilidad de una derrota por parte del ejército de Rusia.
El líder del Partido Comunista de la Federación Rusa, Guennadi Ziugánov, ha aprovechado para señalar que el país ya está "en guerra" y no sólo con Ucrania, sino que también con los países miembros de la OTAN. Es por eso que Ziugánov ha pedido medidas políticas, económicas y militares extraordinarias para hacer frente a la situación. Por su parte, varios líderes regionales, como Ramzán Kadírov, de Chechenia, han reconocido los errores cometidos por los generales y han reclamado la movilización general.
Esta negativa de Putin a cambiar de estrategia ha coincidido con la publicación por parte del ministerio de Defensa ucraniano del hallazgo de al menos 440 cadáveres en fosas comunes en la recientemente recapturada ciudad de Izium, en el nordeste del país. Las autoridades de Ucrania han hecho públicas dos imágenes del sitio, donde se pueden ver tumbas sin marcar y personal llevando a cabo exhumaciones. Los partidarios del Kremlin han reaccionado a las acusaciones asegurando que las fosas comunes encontradas no son más que un "montaje".