El primer ministro libanés, Najib Mikati, ha ordenado elevar una queja "urgente" delante del Consejo de Seguridad de la ONU para protestar por el ataque israelí que hoy causó al menos seis muertos en una oficina del movimiento islamista palestino Hamás en las afueras de Beirut. El mandatario ha pedido al ministro de Exteriores, Abdalá Bou Habib, que presente una queja urgente delante el Consejo de Seguridad en el contexto del "flagrante ataque a la soberanía libanesa con el bombardeo ocurrido en los suburbios sur de Beirut", tal como ha informado la presidencia del Consejo de Ministros del Líbano en un comunicado.

Un dron israelí ha puesto fin a la vida de seis personas este martes por la tarde, entre ellas el número dos de la oficina política de Hamás, Saleh en el Arouri, en el primer ataque contra las zonas de la capital desde la guerra de 2006 entre el Estado judío y el grupo chií libanés Hesbollà. En otra nota, Mikati ha denunciado que la acción busca "llevar al Líbano a una nueva fase de enfrentamientos" y ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que "presione" Israel para poner fin a sus ataques contra territorio libanés. "Como siempre, el Líbano está comprometido con las resoluciones de legitimidad internacional, especialmente la resolución 1701, pero Israel lo ha violado y todavía no está satisfecho con la matanza y la destrucción", ha afirmado el dirigente.

La muerte este martes en un bombardeo en Beirut del número dos de Hamás, Saleh en el Arouri, ha desencadenado la condena de las facciones palestinas, con amenazas de venganza por parte del grupo islamista contra Israel y protestas en las calles. "Assassinat", es como lo han calificado desde el grupo islamista Hamás, la Yihad Islámica y la Autoridad Nacional Palestina, mientras Israel todavía no se ha pronunciado oficialmente.

Hamás ha culpado a "la ocupación sionista", en alusión a Israel, de asesinar "cobardemente" a líderes palestinos "dentro y fuera de Palestina". El bombardeo contra su oficina de Beirut "prueba una vez más el completo fracaso" de Israel a Gaza, aseguran desde la dirección de Hamás en un comunicado. El brazo armado de Hamás, las Brigadas en el Qasam, del cual era cofundador Saleh en el Arouri, ha prometido "una respuesta a todos los crímenes" contra los palestinos. Por otra parte, la Yihad Islámica ha definido el ataque como un "cobarde y alevoso asesinato". Esta facción tiene que tiene una fuerte presencia militar en Gaza después de Hamás y también combate al Ejército israelí en la Franja.

El primer ministro del Gobierno de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mohamed Shtayeh, también ha condenado "el asesinato" y ha acusado implícitamente Israel. "Un crimen que lleva|trae la identidad de sus autores", ha dicho en referencia a Israel, aunque sin nombrarlo abiertamente. El primer ministro palestino ha alertado "de los riesgos y repercusiones que pueden derivarse de este crimen".