Los líderes de Corea del Norte y Corea del Sur, Kim Jong-un y Moon Jae-in, han firmado este viernes una declaración en la cual se comprometen a impulsar la "completa desnuclearización" de la península coreana.

En la primera cumbre intercoreana celebrada más de diez años después de la cita anterior, Kim y Moon han anunciado que mirarán de cerrar un acuerdo para conseguir una paz "sólida" y "permanente" a la península. Los dos países continúan técnicamente en guerra porque el conflicto del 1953 no concluyó con un tratado de paz sino con un cese de las hostilidades.

La declaración conjunta de este viernes incluye impulsar una reducción de los arsenales militares, el cese de los "actos hostiles", la conversión de su frontera, altamente militarizada, en una "zona de paz y el impulso de conversaciones multilaterales con otros países, incluido los Estados Unidos.

Reunión previa al acuerdo

En la sesión matutina de la reunión, que duró 100 minutos, "hablaron sobre la desnuclearización y establecimiento de la paz en la península y sobre mejora de las relaciones" entre los dos países, que técnicamente siguen en guerra, según dijo el portavoz presidencial surcoreano, Yoon Young-chan. "Ambas partes están trabajando para resolver sus diferencias y redactar una declaración conjunta", explicó en rueda de prensa el portavoz, quien añadió que las discusiones afectan a la elección de los términos exactos que se incluirán en el texto.

Toda la atención está puesta en esta declaración conjunta y en si incluirá algún tipo de compromiso o alusión al desmantelamiento del programa nuclear norcoreano, después de que el régimen haya mostrado su voluntad de hablar sobre el posible abandono de sus armas atómicas. El único precedente en este sentido data de 1992, cuando los dos países firmaron una declaración comprometiéndose a mantener una península libre de armas nucleares, acuerdo que no se implementó por desavenencias sobre cómo verificar su cumplimiento y malogrado por el posterior desarrollo del programa de armas de Pyongyang.

Por otra parte, Yoon anunció que la primera dama norcoreana, Ri Sol-ju, asistirá al banquete que se celebrará en Peace House, sede principal de la cumbre, y que por tanto también lo hará su homóloga surcoreana, Kim Jung-sook.

La histórica cumbre de hoy supone el primer encuentro entre ambos líderes y la primera ocasión en que un mandatario norcoreano pisa territorio del Sur, ya que la reunión se celebra en la franja sur de la zona de seguridad conjunta (JSA), el único punto fronterizo en el que soldados de los dos países se ven las caras.