Corea del Norte continúa con su deriva belicista sin precedentes. En los últimos días, Pyongyang ha tirado un número recuerdo de misiles más allá de sus fronteras. Este sábado, el ejercido norcoreano ha tirado cuatro misiles balísticos de corto alcance en el mar Amarillo, entre Corea del Sur y China. Las autoridades surcoreanas han detectado el ataque a media mañana, hora local.

Los misiles han sobrevolado unos 130 kilómetros con un apogeo de 20 y una velocidad máxima de Mach 5 (cinco veces la velocidad del sonido). La reacción de hoy de Pyongyang se produce después de que Washington y Seúl decidieran extender hasta el sábado unos ejercicios combinados denominados Vigilant storm en que participaron unas 240 aeronaves.

Este es el ejercicio mayor aéreo combinado de Corea del Sur y los EE.UU. desde el 2017 e incluye la movilización de cazas F-15, F-16, EA-18G (la versión del cazabombardero F-18 adaptada para escenarios de guerra electrónica), F-35A y F-35B, que a diferencia del F-35A puede realizar despegues en corto y despegues y aterrizajes en vertical, según recuerda Efe.

Una escalada de tensiones inédita

Los últimos ejercicios militares norcoreanos han sobrepasado límites que nunca habían sido tocados. Desde tirar un proyectil en las aguas territoriales surcoreanas hasta disparar la mayor cantidad de misiles en su historia de prácticas militares. Como es costumbre, Corea del Sur y Japón han estado en el punto de mira del Norte. Seúl ha respondido con prácticas militares y haciendo más estrechos sus vínculos con los Estados Unidos. Japón ha tildado de "provocación" la muestra de bastante norcoreana de los últimos días.

La tensión en la península está consiguiendo cotas inéditas ante las repetidas pruebas de armas norcoreanas, las maniobras de los aliados y la posibilidad de que, tal como indican los satélites, el régimen de Kim Jong-un ya esté listo para hacer la primera prueba nuclear desde el 2017. La hostilidad constante de Corea del Norte no es nueva, pero esta intensificación de los ataques sin motivo aparente preocupa a la comunidad internacional.

Corea del Norte y Rusia

Por otra parte, Corea del Norte también ha protagonizado titulares los últimos días después de que los Estados Unidos acusaran a Pyongyang de suministrar una cantidad "significativa" de proyectiles en el Kremlin para atacar en Ucrania. Concretamente, la Casa Blanca ha afirmado que Corea del Norte estaría desviando entregas de países de Oriente Medio y del norte de África para enviarlas hacia Rusia. "No queremos que ninguna nación ayude en Rusia, de ninguna forma ni manera", ha sentenciado la administración de Joe Biden.