El presidente de FranciaEmmanuel Macron, ha reclamado a los líderes mundiales unidad para conseguir la paz y hacer frente a los nacionalismos en el acto central para conmemorar el centenario del final de la Primera Guerra Mundial, en París. "El patriotismo es exactamente el contrario del nacionalismo, que es su traición", ha afirmado.

Ante decenas de jefes de estado y de gobierno, entre los cuales la canciller alemana, Angela Merkel, los presidentes norteamericano, ruso y turco, Donald Trump, Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan respectivamente, y el rey Felipe VI, Macron ha instado a sus homólogos a hacer frente "juntos" a retos como la pobreza, el cambio climático, el hambre y las enfermedades.

Así, Macron ha hecho un llamamiento a la unidad de los países de todo el mundo a favor de las "naciones libres del mundo" y de la "fraternidad" entre estados. En este sentido, ha destacado "la amistad forjada entre Alemania y Francia" e instituciones supranacionales como la UE y la ONU, con un recordatorio por su predecesora, la Sociedad de Naciones.

El presidente francés, que ha recordado los millones de muertos, heridos, viudas y huérfanos ocasionados por la Primera Guerra Mundial, ha instado el mundo a tener en cuenta la "lección" del conflicto bélico que acabó este domingo hace cien años. Además, ha dibujado Francia como una república "generosa" y ha recordado que miles de soldados franceses cayeron "por la nación y la democracia". Según él, los conceptos de patriotismo y nacionalismo son antagónicos, y los nacionalismos se tienen que combatir y representan la "traición" del patriotismo.

El acto ha empezado a las 11 de la mañana, justo la hora exacta en que el 11 de noviembre de hace 100 años se firmaba el armisticio que ponía punto final a la Primera Guerra Mundial en un vagón de tren en Compiègne, en el norte de París. Campanarios de iglesias y catedrales de toda Francia han sonado a la hora en punto, mientras que en los Campos Elíseos llegaban coches y autocares con decenas de líderes mundiales.

Sánchez, presente en el acto

Jefes de estado y de gobierno de todo el mundo como también el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, han hecho a pie los últimos metros entre la icónica avenida de la capital francesa y el Arco de Triunfo. Lo han hecho juntos, en una comitiva donde también ha participado personalidades como el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, o el expresidente francés Nicolas Sarkozy.

Ha habido, sin embargo, dos excepciones que no se han unido al paseo conjunto. Primero el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y la primera dama Melania, y unos minutos después el presidente de Rusia, Vladimir Putin, han llegado a la tribuna donde el resto de líderes los estaban esperando unos minutos tarde fuera de la comitiva "por cuestiones de seguridad", según han afirmado medios franceses.

Aparte del parlamento de Macron, el acto ha contado con el presidente francés pasando revista a soldados galos, varias interpretaciones musicales y la lectura de testigos de la Gran Guerra por parte de jóvenes de varios países. El acontecimiento ha acabado con la interpretación del Boléro de Maurice Ravel y con el jefe de estado de Francia reanimando la llama situada en el monumento al soldado desconocido, en el Arco de Triunfo.