Uno de los hombres leales a Vladímir Putin y líder de Chechenia, Ramzan Kadírov, ha anunciado que enviará a sus hijos de 16, 15 y 14 a la guerra. "Pronto se marcharán a primera línea del frente", ha detallado este lunes, en medio del descalabro ruso en Ucrania. Kadírov ha explicado que "su formación militar empezó hace mucho tiempo, desde una edad muy temprana". Es por eso que asegura que se trata de un deseo de los adolescentes y que él solo puede celebrarlo. Pero la realidad es que hace dos días que está muy molesto por la derrota de Rusia en Limán (Donetsk), de manera que apuesta por "medidas más radicales".
Entre estas "medidas más radicales" destaca el uso "de armamento nuclear de baja potencia". "Desde mi punto de vista, hay que tomar medidas más radicales hasta el punto de declarar la ley marcial en territorios fronterizos y utilizar armamento nuclear de baja potencia", dijo este fin de semana, ante el éxito de la contraofensiva ucraniana. Y es que el líder checheno está nervioso con la última derrota de las tropas rusas: "Ayer, Izium (Járkov); hoy, la bandera ucraniana en Limán. ¿Y mañana, qué?".
El Kremlin censura Ramzan Kadírov
El Kremlin ha intentado quitar hierro a las peligrosas declaraciones de Kadírov sobre la necesidad de utilizar "armamento nuclear de baja potencia". "Los jefes de regiones pueden expresar su punto de vista y hacer valoraciones. Al fin y al cabo, son dirigentes de regiones enteras, incluido Ramzan Kadírov, quien desde el inicio de la operación militar especial ha hecho mucho y ha contribuido mucho", ha expresado el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov. Entonces, Peskov se ha limitado a decir que el comentario del líder checheno es "emotivo" y que "las emociones tienen que quedar al margen de las valoraciones, incluso en tiempos difíciles". El gobierno ruso prefiere guiarse por "valoraciones equilibradas y objetivas". Finalmente, ha destacado que la aportación de Chechenia a la invasión de Ucrania es "heroica y eficaz": justo en el inicio de la guerra, más de 10.000 soldados chechenos fueron movilizados.
Sin embargo, este fin de semana han saltado las alarmas porque la OTAN ha alertado de la movilización de un submarino nuclear ruso. Se trata del K-329 Belgorod, portador del misil nuclear Poseidón (más conocido como el Arma del Apocalipsis). Pero el Kremlin no parece dispuesto a utilizar armas nucleares, de momento. Así lo demuestra la censura de la peligrosa estrategia de Kadírov, que se ha visto obligado a buscar otra vía. ¿Qué vía? Pues la de enviar a sus hijos menores de edad a la guerra. Y es que el líder checheno no tiene compasión, tal y como ya demostró movilizando a Ucrania a los hijos y los maridos de las mujeres de su región.