Estados Unidos, Japón y Corea del Sur llevan a cabo desde este lunes unos ejercicios militares conjuntos de detección de misiles, en respuesta a las amenazas de Corea del Norte.

Los ejercicios, que durarán dos días, se realizarán en aguas próximas a Japón y a la Península de Corea, tal como ha informado la marina de las Fuerzas japonesas de Autodefensa (Ejército): "El objetivo de las maniobras es mejorar la técnica estratégica y estrechar relaciones con los Estados Unidos y Corea del Sur ante la difícil situación que atraviesa nuestro país por las pruebas nucleares y de misiles de Corea del Norte".

Las operaciones de entrenamiento, que incluirán varios destructores de los tres países equipados con el sistema de radar Aegis, consistirán en detectar de manera simulada cualquier misil lanzado por Corea del Norte, según ha detallado el Estado Mayor Conjunto (JCS) de Corea del Sur.

Sexto ejercicio antimisil de los aliados

Se trata del sexto ejercicio antimisil realizado por los aliados desde el 2016 y llega después de que la semana pasada Seúl y Washington concluyeran en territorio de Corea del Sur el ejercicio "Vigilant ACE", el cual supuso un enorme despliegue de activos que quiso servir de respuesta al último lanzamiento de misiles norcoreano.

El Ejército de Corea del Norte disparó el 29 de noviembre a modo de prueba el Hwasong-15, que hasta día de hoy es su ICBM más adelantado y sitúa en Pyongyang cada vez más cerca de poder alcanzar los Estados Unidos con armas nucleares