Movimientos extraños a Rusia en medio de la guerra en Ucrania. Una undécima de aviones del escuadrón de vuelo especial ruso se han elevado este jueves en Moscú y se han dirigido al este del país, bien pasada la cordillera de las Urales. Eso incluye el avión presidencial ruso, el Ilyushin Il-96-300PU. Horas después, algunos han devuelto en la capital rusa. ¿Lo más extraño de todo eso? Aunque los aviones militares pueden evitar ser detectados por los radares, esta operación se ha llevado a cabo a la vista de todo el mundo. Inmediatamente, las redes se han llenado de las especulaciones de aficionados al material bélico y a la aviación sobre el motivo de estos movimientos.

Aviones militares

Entre los aviones militares que Rusia ha movido este jueves hacia el este del país, se encuentran el avión oficial del presidente ruso, Vladímir Putin, y dos variaciones de este modelo más. También se han detectado varios modelos de Tupolev, que habría aterrizado en la ciudad de Novossibirsk, un Antonov y un Sukhoi Superjet. Estos son aviones, o bien con una gran capacidad para transportar mercancías y personas, o para hacer recorridos pequeños. Según las especulaciones de los aficionados a la aviación, Moscú querría sembrar el pánico en occidente al puro estilo de la guerra fría, haciendo ver que los altos cargos del Kremlin se dirigen a búnkeres nucleares. Es decir, un 'farol' para amenazar con armas nucleares. Una animación del supuesto recorrido de los aviones muestra que algunos han vuelto a Moscú después de detenerse en el este del país.

 

El coste de la guerra

La invasión en Ucrania por parte de Rusia ya hace 22 días que empezó. En este tiempo miles de civiles ucranianos han perdido la vida, pero la resistencia del país también se ha cobrado la vida de un gran número de soldados rusos. Las agencias de inteligencia de los EE.UU. estiman que más de 7.000 soldados rusos han muerto en las tres semanas que hace que dura la guerra, una cifra que supera a los militares norteamericanos que perdieron la vida a las guerras del Iraq y el Afganistán, según recopilación The New York Times. Funcionarios norteamericanos han informado de que las bajas están teniendo un gran efecto negativo sobre las acciones rusas, ya que cuando el 10% de los miembros de una unidad militar mueren o resultan heridos, esta unidad ya no es capaz de llevar a cabo acciones de combate. Según las informaciones norteamericanas, actualmente, más de 150.000 militares rusos participan en la guerra en Ucrania y entre 14.000 y 21.000 están heridos, cosa que podría significar que la mayoría de las unidades de combate están bajo mínimos. A esta estimación se le tiene que sumar la información confirmada que al menos tres generales rusos han muerto en el campo de batalla, según informa Efe.