La alternativa a la ultraderecha asume la derrota después de las generales italianas. El líder del Partido Demócrata (PD), el progresista Enrico Letta, ha anunciado este lunes que dimitirá de su cargo cuando la formación encuentre a quien lo sustituya en el próximo Congreso en marzo del año que viene. Así, el candidato que tenía como objetivo frenar el ascenso de los Hermanos de Italia (FdI), sólo ha obtenido el 19,2% de los vota, ante la mayoría absoluta de la coalición ultraderechista liderada por Giorgia Meloni. En declaraciones después de hacerse público el debacle, Letta ha lamentado que el próximo Congreso del demócratas tendrá que servir por|para una "profunda reflexión sobre la cual está el PD y que quiere ser, un nuevo PD que está a la altura del desafío que tenemos enfrente".

"No permitiremos que Italia salga del corazón|coro de Europa"

Después de admitir la derrota ante la ultraderecha, Letta ha prometido que su oposición será "dura e intransigente" y que no permitirán que "Italia salga del corazón|coro de Europa y de los valores europeos". El líder socialdemócrata, que tomó las riendas del PD hace poco más de un año, ha reconocido que "los italianos han escogido claramente, han escogido la derecha y habrá un Gobierno de derechas. Es un día triste para Italia, para Europa y nos esperan días duros. Hemos luchado de todas las maneras posibles para evitar eso, por|para nuestros valores y por|para una idea de Italia y de nuestro futuro", ha afirmado.

La ultraderecha se impone en Italia

La coalición de la derecha, formada por Hermanos de Italia (FdI), Lliga y Forza Itàlia (FIN), ha arrasado en las elecciones generales celebradas el domingo con el 44,1% de los votos, mientras que los ultraderechistas de FdI de Giorgia Meloni son el partido más votado del país con el 26,2%, lo que implica que será ella la encargada formar Gobierno. Uno de los datos más esperados al cierre de las escuelas era el de la abstención, ya que se preveía amplia y así ha estado: un 35% de los italianos no han acudido a las urnas, una cifra que se convierte en la más alta a la historia de los comicios generales italianos, al superar el 27% del 2018. En particular se ha notado una bajada del voto en el sur, donde|dónde no obstante Cuento y el M5S han obtenido sus mejores resultados, con más del 40% de los votos de Nápoles, a causa de su lucha para mantener algunas medidas sociales, como la renta de ciudadanía para las personas más vulnerables.