Parece que Elon Musk le ha cogido el gusto a la polémica. El fundador de Tesla anunció el pasado sábado, por sorpresa, que ya no seguiría pagando los gastos del sistema Starlink en Ucrania, pero ahora ha dado marcha atrás y ha confirmado que finalmente eso no será así. Starlink es un servicio de internet que funciona a través de satélites propios y que ha ayudado en el ejército, la población y la administración de Ucrania a mantener las conexiones durante los ataques de Rusia. Musk, que ofreció este servicio al inicio de la guerra, anunció por sorpresa que a partir de ahora ya no cubriría los gastos y que tendría que ser el Pentágono quien lo hiciera. "No estamos en condiciones de dar más terminales en Ucrania ni de financiar los terminales existentes durante un periodo de tiempo indefinido", afirmó Musk. Ahora, pero ha dado marcha atrás y nada cambiará por lo que respecta al servicio de Starlink en territorio ucraniano. Así lo ha confirmado en Twitter. "Al diablo con eso... Aunque Starlink todavía pierde dinero y otras empresas están recibiendo miles de millones de dólares de los contribuyentes, seguiremos financiando a Ucrania gratis", escribió.

El gobierno ucraniano explicó que el sistema de internet de Musk los ha ayudado a recuperar infraestructuras clave atacadas por Rusia en los últimos meses y, por lo tanto, quedarse sin este servicio sería un revés importando para el ejército de Zelenski. Después de anunciar su decisión, las redes se llenaron de críticas y reproches hacia Musk, quien finalmente se ha retractado. El programa Starlink cuesta 20 millones de dólares al mes de mantener, según el magnate sudafricano. Recientemente, dijo que SpaceX había gastado 80 millones de dólares hasta ahora para mantener Ucrania en línea. "Aparte de los terminales, tenemos que crear, lanzar y mantener los satélites de reposición y las estaciones terrestres", escribió en Twitter. "También nos hemos tenido que defender de los ciberataques, que se están haciendo más difíciles", afirmó. Después de la decisión de Musk, el Pentágono anunció que estaba "estudiando" hacerse cargo de los gastos que suponía el sistema, pero no dio más detalles.

El vice primer ministro de Ucrania, Mikhailo Fedorov, minimizó las tensiones con Musk, escribiendo en Twitter que el multimillonario "es uno de los principales donantes privados del mundo que dan apoyo en Ucrania". "Starlink es un elemento esencial de nuestra infraestructura crítica", afirmó. Aparte del sistema Starlink, Musk se ha implicado personalmente en la resolución del conflicto, aunque ha recibido a muchas críticas a sus controvertidas propuestas. El billonario afirmó que Ucrania podría ceder territorios ocupados por Rusia con el objetivo de buscar una solución pacífica, pero el embajador saliente de Ucrania en Alemania, Andrij Melnyk, publicó un tuit que decía a Musk que se fuera "a hacer puñetas".

Hace pocos días, el fundador de Tesla y SpaceX también afirmó que había estado hablando con Putin, pero finalmente confirmó que eso no era del todo cierto y que la única vez que había hablado con el mandatario ruso fue hace dieciocho meses. "Hablamos del espacio", puntualizó Musk. Sin duda parece que Musk está bien implicado en el conflicto, aunque a menudo sus declaraciones no son demasiado bien recibidas entre los usuarios de las redes y los dirigentes europeos.