La líder del Partido Conservador en Escocia, Ruth Davidson, ha dimitido un día después de que el primer ministro británico, Boris Johnson, haya forzado una polémica suspensión del Parlamento hasta mediados de octubre.

En una carta dirigida al presidente de la federación escocesa, Davidson ha alegado motivos familiares, pero también ha admitido su "conflicto con el Brexit". La conservadora ha explicado que a pesar de no estar de acuerdo con la salida del Reino Unido de la Unión Europea, ha intentado "diseñar un curso de acción" para su partido que "reconozca y respete el resultado del referéndum", al mismo tiempo que "maximice las oportunidades y mitigue los riesgos para industrias y sectores escoceses claves".

Elegida en el 2011 con 32 años como cabeza de los tories escoceses, Davidson ha asegurado que ejercer este cargo en los últimos ocho años ha sido "el privilegio" de su vida.

Con la decisión de Boris Johnson de paralizar la actividad de la Cámara británica entre el 10 de septiembre y el 14 de octubre, los opositores de un "brexit" sin acuerdo no tendrán tiempo para tramitar iniciativas que bloqueen este escenario.

De hecho, ayer mismo la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon instó a Ruth Davidson, a confirmar que los miembros de su federación en el Parlamento de Westminster dieran apoyo a las iniciativas legislativas de la oposición para evitar este escenario.