Seis cineastas catalanas han sido repatriadas por el Ministerio de Exteriores después de haberse quedado atrapadas por la crisis del coronavirus en el Kurdistán iraquí cuando estaban gravando una película. Según informa eldiario.es, las seis catalanas han llegado este mismo miércoles a la base aérea de Zaragoza en un avión del Ejército del Aire procedente de Bagdad.

El grupo de cineastas legaron a Irak a finales del mes de febrero para grabar una película, dirigida por Ana Maria Bofarull, en la ciudad de Duhok, según informa el mismo periódico. No fue hasta el 9 de marzo que la embajada española en el país se puso en contacto con ellas para repatriarlas, pero la mayoría del grupo decidió rechazar la oferta y solo dos integrantes regresaron.

El regreso

No es hasta el 25 de marzo que Exteriores vuelve a ponerse en contacto con el grupo de cineastas para repatriarlas. En esta segunda ocasión, con una situación mucho más complicada, la película acabada y con el estado de alarma decretado en España, aceptan la oferta del Gobierno.

Ahora bien, ya no hay vuelos comerciales entre Irak y España y salir en coche del Kurdistán es peligroso ya que se puede topar con el Daesh. En estas circunstancias, Exteriores decide trasladarlas en coche hasta la ciudad de Erbil, capital de la región donde hay un consulado español, allí pasan tres noches.

La repatriación, propiamente dicha, no empieza hasta este mismo martes, cuando cogen un helicóptero militar hasta la base militar de los Estados Unidos en Bagdad. Una vez allí cogen el avión hacia Zaragoza junto a otro grupo de españoles que estaban en la misma ciudad de Bagdad.

Vuelo desde Afganistan

El trabajo de la embajada en Afganistán y el mando militar español en el país también ha permitido que saliese de Kabul un vuelo militar de tropas españolas en Afganistán con 6 alemanes, 1 suizo y 3 franceses.

Este mismo vuelo ha efectuado también una parada en Abu Dhabi, donde recogió a un grupo de 8 turistas españoles para seguir ruta hasta la base militar de Torrejón de Ardoz.