Estrenamos sección “personajes del vino”. Son aquellas personas que han marcado la enología y viticultura moderna. Y cómo no he empezado con el nombre del que dicen que es el descubridor del Champagne en la Abadia de Hautvillers (cerca de Épernay): el monje benedictino Pierrre Pérignon  (1638-1715). Más que del champagne sería el inventor de lo que se denomina método tradicional o champegnoise. El mito dice que cuando probó la bebida que contenían las botellas estacionadas en el sótano, exclamó “¡Venid, pronto, estoy bebiendo las estrellas!. Aunque los historiadores no se ponen de acuerdo si fue él o no verdaderamente quién descubrió la segunda fermentación, la carbónica, en botella.  Existe un documento en la Royal Society de Londres con fecha de 1662 que Christopher Wren le ponía azúcar al vino y melaza para hacerlo espumoso. También se sabe que Pérignon lo descubrió de manera fortuita. Su intención no era ni mucho menos esta. Quería innovar haciendo un vino blanco a partir de uvas tintas (lo que se denomina un blanc de noirs) intentando evitar el contacto con las pieles que es donde hay el color del vino. Y su problema fue que sin quererlo le aparecían burbujas en dicho vino. El vidrio en ese momento no estaba preparado para esta segunda fermentación en botella. Cuando después del frío invierno del clima continental de la zona subía la temperatura con  la primavera explotaban. ¡Muchas veces una sola botella hacía que explotaran las otras que tenía cerca! Para este monje su vino estaba literalmente “loco”. Así que puso el tapón de corcho para que las botellas pudieran aguantar mejor esa presión. 

 

Pero aparte de este personaje que existió realmente, muchos pensaran en que comparte nombre propio con la  hiperconocida marca de Moët & Chandon. Esta marca tiene una mezcla aproximada de 55% Chardonnay y 45% Pinot Noir y 7 gramos de azúcar/litro. La primera cosecha de Dom Pérignon fue en 1921 y no se puso a la venta hasta el 1936. El chef de cava es Vincent Chaperon, discípulo del anterior Richard Geoffroy. La añada actual es y hay vintage, Rosé y Plénitude 2. Así es la historia de esta bebida de lujo que se atribuye a un joven monje ciego.