El verano es la época perfecta para disfrutar de un delicioso helado. Esta delicia cremosa y refrescante es una opción perfecta para refrescarse en un día caluroso, pero, no obstante, con tantas heladerías disponibles, puede ser difícil encontrar el mejor helado.
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Desde la sección veraniega de La Tumbona, te ofrecemos cuatro trucos que te ayudarán a encontrar los mejores helados, pero siempre podéis empezar por preguntar a vuestros amigos y familiares si tienen recomendaciones de heladerías en localizaciones que queréis visitar. Si sabeo que alguien tiene un paladar exigente, sus recomendaciones son más probables que sean acertadas. Si seguís estos trucos, muy seguro encontraréis los mejores helados para disfrutar este verano.
1. Busca una heladería artesanal
Las heladerías artesanales utilizan ingredientes frescos y de alta calidad. Eso significa que sus helados tendrán un sabor más intenso y natural que los helados producidos en masa. Las heladerías artesanales también suelen tener una mayor variedad de sabores, ya que pueden experimentar con diferentes combinaciones de ingredientes.
2. Atención a la textura
Un helado de buena calidad tiene que tener una textura cremosa y suave. Si el helado está demasiado duro, será difícil de comer y no tendrá un sabor tan intenso. Si el helado está demasiado líquido, será fácil que se deshaga y no tendrá una textura agradable. La textura cremosa de un helado se debe a la combinación de varios factores, como la calidad de los ingredientes, el proceso de fabricación y la temperatura de conservación. Los helados artesanales, que usan ingredientes frescos y de calidad, suelen tener una textura más cremosa que los helados industriales.
3. Prueba los sabores
No os conforméis con el primero en que veáis. Probad varios sabores para encontrar lo que más os guste. También podéis pedir una muestra si no estáis seguros y a la mayoría heladerías os darán sin ningún problema. Las heladerías artesanales suelen ofrecer una amplia variedad de sabores, desde los clásicos, como la vainilla y el chocolate, hasta los más exóticos, como el maracuyá y el mango. Probáis y experimentáis nuevos sabores y descubriréis una gran variedad de helados que quizás pensabais que nunca os gustarían.
4. Lee las críticas
Hoy en día tenemos la gran suerte de que contamos con herramientas digitales que nos permiten saber la opinión de otros clientes de los lugares que visitamos. Utilizando, por ejemplo, Google Maps, podremos saber cómo ha sido la experiencia de otra gente en la heladería que tenemos creído visitar. Búsqueda reseñas de clientes a las cuales hayan probado los helados de la heladería que te interesa. Las reseñas pueden darte una idea del sabor, la textura y la calidad de los helados de la heladería, y también del servicio que ofrece el personal.
Además de estos trucos, también podéis tener en cuenta la ubicación de la heladería. Las heladerías situadas en áreas muy turísticas acostumbran a tener helados más industriales y las más tradicionales pueden estar más alejadas de los núcleos turísticos.