El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, se ha mostrado "confiado" que la entidad resultante de la posible fusión entre CaixaBank y Bankia tendrá la sede social en Valencia, una decisión que ha tildado de "fundamental". Puig ha defendido que "es el espacio adecuado" d'estabilidad y que sería un "aval importante" para el País Valencià.

Así se ha manifestado Puig este sábado en una comparecencia ante los medios, donde también ha defendido que Valencia es un espacio "amable" a la inversión y que "favorece la toma de decisiones". Desde que se supo que las dos entidad bancarias estudiaban fusionarse, todo apunta a que la sede social de la entidad resultante se quedará en Valencia, donde desde el 2017 está la sede de CaixaBank.

La sede social de Caixabank-Bankia

"CaixaBank tendría que volver a tener la sede en Catalunya", valoró al conseller de Economía, Ramon Tremosa, nada más conocer la noticia de la posible fusión. El consejo de administración de CaixaBank decidió el 6 de octubre de 2017 trasladar la sede social en Valencia, ante el escenario abierto por una hipotética declaración de independencia de Catalunya después del referéndum del 1-O.

CaixaBank

Las oficinas de CaixaBank en Barcelona. / CB

La entidad justificó la decisión por la "prioridad" de proteger sus clientes, accionistas y empleados y "salvaguardar plenamente la seguridad jurídica y reguladora" ante "la actual situación política y social de Catalunya".

Reticencias a la fusión

Tremosa también se mostró reticente con la entidad resultante de la suma de los dos bancos a causa del creciente oligopolio que podría generar. La fusión entre CaixaBank y Bankia daría lugar al primer banco español con unos activos totales de 664.027 millones de euros, al sumar los 445.572 millones del banco catalán y los 218.455 millones de Bankia.

También hay reticencias sobre el futuro de los trabajadores de las dos entidades y la posible eliminación de algunas oficinas. Por su parte, Ximo Puig ha señalado que las empresas tendrán que abordar la reforma "con la menor pérdida de puestos de trabajo posible". "Se trata de hacerlo de la mejor manera en defensa de los intereses de los clientes valencianos y de los trabajadores", ha defendido.

 

Imagen principal: El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig. / EP