Camil Ros, el secretario general del sindicato UGT de Catalunya, ha explicado esta mañana que se centrará los próximos meses al asegurar que las patronales cumplen los acuerdos interprofesionales firmados a escala estatal y autonómica, y seguirá reclamando al Gobierno la derogación de la última reforma laboral. Además, Ros ha destacado la importancia del cumplimiento de estos acuerdos, después de "años de crisis y de bloqueo de la negociación colectiva".

"Esperamos que este segundo semestre sea el inicio real de la recuperación de salarios y derechos", ha dicho el líder sindicalista. Ros ha indicado que estos acuerdos -Acuerdo (estatal) para el Empleo y la Negociación Colectiva y Acuerdo Interprofesional de Catalunya- se traducen en incrementos salariales, recuperación del poder adquisitivo o al "expulsar compañías multiservicios que provoquen la explotación laboral".

Los pactos

En concreto, alcanzar un sueldo mínimo interprofesional de 1.000 euros mensuales o percibir incrementos salariales del 3% (un 2% fijo y un 1% variable) son dos de las principales medidas pactadas en las negociaciones entre los agentes sociales y el Gobierno.

La aplicación de estas medidas se tiene que hacer "en todos los convenios colectivos cuando toque, en su momento de renovación, pero hay aspectos que ya se pueden modificar. Seremos muy contundentes en la aplicación de estos acuerdos", ha reafirmado al líder sindical. "Hemos hecho el esfuerzo de firmar, porque podríamos haber seguido la movilización", ha añadido Ros, que asegura que si no se aplicaran correctamente las condiciones pactadas, el sindicato no descarta nuevas movilizaciones si no se detectan avances en el seguimiento.

Pide la derogación de la reforma laboral

UGT también seguirá reclamando la derogación de la reforma laboral del PP, cosa que espera que se produzca a corto o medio termine. Después, ha añadido, el objetivo es alcanzar "un acuerdo tripartito (patronales, sindicatos, Gobierno) para una nueva legislación laboral que fomente la estabilidad".

Ros ha asegurado que aunque se haya producido un cambio de Gobierno y ahora Pedro Sánchez, y "por mucho que tenga un discurso diferente", el sindicato no renunciará a la anulación de la reforma laboral impulsada por Mariano Rajoy.

Las condiciones laborales pre-crisis, el objetivo

El sindicato aspira a conseguir las mismas condiciones laborales anteriores a la crisis económica y denuncia la falta de inversión en políticas públicas que fomenten los planes de empleo y formación de los últimos años.

Por otra parte, Ros ha destacado el contenido del Acuerdo Interprofesional de Catalunya, que firmarán formalmente la primera semana de septiembre los sindicatos CCOO y UGT y las patronales catalanas Fomento del Trabajo, Pimec y Fepime, para abordar la cuestión actual de las empresas que basan su actividad en la economía colaborativa.

La economía colaborativa es más cerca de la explotación que de otra cosa. Todos estos trabajos tienen que tener también un marco legislativo que dé cobertura a los derechos del trabajador, y eso sólo se puede conseguir ampliando la negociación colectiva", ha asegurado el líder de UGT Catalunya, planteándolo como otro reto para el sindicato.