Telefónica prevé implantar en España a partir de septiembre la jornada laboral de cuatro días con la bajada de sueldo correspondiente, aunque con una bonificación por parte de la empresa de un 20%, para todos los trabajadores que lo soliciten tras su programa piloto. Los empleados que opten por esta opción, que se pondrá en marcha en septiembre y se desarrollará hasta diciembre, trabajarán 32 horas a la semana, ocho horas diarias de lunes a jueves. De la reducción de jornada semanal de 5,5 horas, la empresa bonificará un 20%.

La compañía lanzará esta iniciativa tras valorar positivamente el programa piloto que puso en marcha el pasado mes de octubre con las mismas condiciones, al que se inscribieron alrededor de 150 trabajadores y que, aunque en un principio iba a durar tres meses, se ha ido prorrogando. La puesta en marcha de la jornada de cuatro días se encuadra dentro de las medidas de conciliación y flexibilidad laboral desarrolladas por la compañía, como los dos días semanales de teletrabajo o la fórmula de trabajo en movilidad recogidas en su convenio colectivo.

Esta decisión de Telefónica España llega, además, después de que unas 70 compañías del Reino Unido iniciaran este pasado lunes una prueba piloto de una semana laboral de cuatro días con el mismo salario, la mayor en el mundo según sus organizaciones, que durará seis meses a fin de establecer si puede adoptarse sin pérdida de productividad. Esta medida afecta a los empleados de Telefónica España, Telefónica Móviles y Telefónica Soluciones, que suman en torno a 17.000 trabajadores. 

10% de los empleados por unidad

Telefónica España ha acotado a un 10% de los empleados de cada unidad el número máximo de adscritos a la jornada laboral de cuatro días a la semana, que será de carácter voluntario y que contempla una bajada de sueldo de un 12%, según han informado este jueves fuentes UGT. UGT ha desvelado este jueves más detalles sobre esta iniciativa de Telefónica España que se pone en marcha tras un programa piloto, al que se acogieron un centenar de empleados y que ha tenido una "buena valoración", según las fuentes. Se trata de una medida que los empleados empezarán a disfrutar, si así lo solicitan, a partir del 1 de septiembre, siempre que el número de adscritos no sobrepase el 10 % de la plantilla de cada unidad.

A partir del 1 de enero de 2023, se pretende extender la medida de manera anual para lo que el operador abrirá a finales de año otro período de adscripción, momento en el que UGT pretende mejorar la bonificación que actualmente ofrece la empresa. Esta medida se enmarca dentro del acuerdo del Plan Social de Empleo, que actualmente se está desarrollando, que propone regular además de la jornada, el teletrabajo y la posible deslocalización de actividades para dotar de las mismas a las pequeñas provincias.