El Gremio de Hoteles de Barcelona ha amenazado con llevar a los tribunales el aumento de la tasa turística en la ciudad que ha aprobado el pleno del Ayuntamiento. El presidente de la asociación, Jordi Mestre, se ha opuesto "rotundamente" al recargo de hasta cuatro euros y ha recordado que el sector hotelero paga 320 millones de euros en impuestos.

Mestre ha pedido una mejor gestión de estos recursos y ha planteado que se apliquen tasas similares en otros ámbitos como el comercio, la restauración o el transporte que también se benefician de la llegada de turistas. Todo, en una rueda de prensa en la cual ha hecho balance de una temporada de verano "positiva" después de un 2018 "complicado".

Los hoteles de Barcelona han registrado un incremento del 5% del precio medio y de la facturación durante julio y en agosto en comparación con el año pasado, un dato "positivo" pero es un 8% inferior a la del 2017.

"El sector hotelero ha pasado de ser el demonio y a ser el recaudador oficial del Ayuntamiento. Nos oponemos absolutamente en qué se aplique este incremento y, es más, iremos hasta donde haya que ir", ha asegurado Maestro.