Ya lo decía Miguel Vicente, presidente de Barcelona Tech City y co-fundador de Antai Venture Builder en una comida Cámara: "El próximo Spotify se podría crear en Barcelona". Y es que el universo emprendedor catalán tiene un gran potencial, con nombres de cabecera que suenan por todas partes, como SocialCar, Glovo o Wallapop. Los nombres en inglés no nos tienen que engañar: todas estas start-ups tienen el corazón catalán. ¿Por qué Catalunya atrae la emprendeduría y cuáles son las start-ups que más triunfan?

Barcelona, 3ª ciudad del mundo en atracción de talento

Vicente hacía esta referencia a Spotify, la plataforma norteamericana de reproducción de música vía streaming que se ha hecho viral mundialmente, en una comida Cambra de hace unos meses. Ahora, en declaraciones en El Nacional, el presidente de Bcn Tech City, lo confirma. "Spotify es un gran ejemplo de éxito y aquí tenemos este ecosistema de capital, emprendedores y capacidad de atraer talento", los ingredientes clave para triunfar como nido de start-ups y empresas tecnológicas.

De hecho, Barcelona es la ciudad de España que concentra la mayoría de startups, concretamente el 34% del total. En cuanto a la inversión, el ecosistema emprendedor invirtió, sólo en la ciudad de Barcelona, ​​453 millones de euros durante el 2017 y concentra el 58% de la inversión hecha en el conjunto de España, un 2% más que el ejercicio anterior.

"Barcelona es la tercera ciudad del mundo en atracción de talento", un ingrediente clave para la creación de start-ups con visión global, y que al mismo tiempo tiene también talento local y bien formado. Al mismo tiempo, asegura, Catalunya, y sobre todo Barcelona, "tiene un ADN muy atractivo". "Lo que antes era una ciudad de pymes y empresarios, ahora se ha convertido en un sitio de start-ups y emprendedores".

 

La "mentalidad Mediterránea"

Por su parte, el emprendedor e inversor privado Carlos Blanco, una de las principales referencias en el mundo de las start-ups del país, asegura en El Nacional las virtudes de Barcelona como lugar atractivo: "se trata de un lugar de mentalidad emprendedora, cosa que se mujer porque es una ciudad Mediterránea, y eso juega un gran papel".

Según Blanco, la balanza para escoger Barcelona se decanta, principalmente, por la buena calidad de vida y las oportunidades de negocio que ofrece, y eso "atrae el talento internacional, extranjeros que sean co-fundadores de empresas locales".

"Además, aquí tenemos muy buenas escuelas de negocio", asegura Blanco. Respecto de la situación política, Blanco explica que "a los inversores les gusta vivir en Barcelona a pesar de los políticos". "La inestabilidad política ha perjudicado, pero aun así Barcelona se ha convertido en la tercera ciudad preferida para los emprendedores".

De hecho, el atractivo barcelonés ha sido muy alabado entre empresarios del sector, y ya se habló en las jornadas del Círculo de Economía de Sitges, en el que personalidades como Mar Alarcón, fundadora de SocialCar o Estanis Martín de Nicolás, CEO de Schibsted Spain, aseguraban que Barcelona se está consolidando en el mundo de las start-ups y "una tercera parte de los emprendedores vienen de fuera y se quedan, por todo lo que la ciudad ofrece".

Un año "muy intenso" en ampliaciones de capital

"Las start-ups están triunfando", asegura Blanco. "Llevamos 15 años generando start-ups de éxito". En este punto también ayuda a la existencia de la "sociedad civil privada que apuesta por este esfuerzo, como es Barcelona Tech City y el Pier01", asegura el inversor.

Además, el emprendedor tiene un perfil concreto, según explica Miguel Vicente. "Se trata de personas con una perspectiva global, con ganas de sacar adelante una empresa creada aquí pero preparada para competir en el mundo". Con todo, este último año y medio "ha sido muy intenso en ampliaciones de capital", cosa que "demuestra también la madurez del sector".

Según Vicente, vistas las ventajas de Barcelona como a incubadora de start-ups triunfadoras, "no hay ningún motivo para pensar que el próximo Spotify no se pueda crear en Barcelona". "Muchos de los inversores de Spotify mismo también invierten en start-ups de aquí", asegura. Además, todo eso coincide con la apuesta por Barcelona de varias grandes empresas tecnológicas como Amazon, Facebook, Moodle y muchas otras, que todavía hacen más atractiva la ciudad para los inversores.

De todos modos, Carlos Blanco no es tan optimista como Vicente, y no ve tan fácil un Spotify barcelonés. "El capital riesgo de Europa no es tan maduro como el de los Estados Unidos, que apuesta por una idea a ciegas sin facturar". Según Blanco, en Europa, la inversión es más aversa al riesgo, y una empresa como Spotify "puede tardar unos 5 años a diseñar su modelo empresarial", una paciencia que según el inversor, aquí falta.

Con un Spotify barcelonés o sin, lo que claro está es que Barcelona es un polo de atracción de la tecnología y la emprendeduría. De entre las start-ups catalanas que más triunfan y que más capital han levantado, estas son unas cuantas:

1. Typeform

Se trata de una start-up nacida en Barcelona y que ha revolucionado la manera de hacer encuestas y formularios de manera sencilla, gracias a un creador intuitivo. Tiene más de 150 empleados, y hace unas semanas recibió una inyección de capital de 35 millones de euros en una ronda capitaneada por General Atlantic, inversores de Privalia, Index Ventures, Point Nine y Connect Ventures. La empresa asegura que durante este 2018, su objetivo es avanzar en su internacionalización hacia Estados Unidos, de donde son la mitad de sus clientes.

2. Red Points

Red Points es una empresa que se dedica a identificar y automatizar la eliminación de falsificaciones online y piratería de contenido digital. La empresa ha conseguido crecer con fuerza, el mes de mayo cerró una ronda de inversión de serie B de 10 millones de euros, con el fin de potenciar su expansión y acelerar su apuesta por el mercado de los Estados Unidos, concretamente en Nueva York, donde abrirá una oficina.

Esta última ronda ha sido liderada por el fondo europeo Northzone -inversor de Spotify- y Mangrove Capital Partners -fondo basado en Luxemburgo en que entró en la empresa en el 2016 en una ronda de 2 millones.

Inicialmente, Red Points empezó en 2011 con el apoyo de inversores locales y business angels de EsadeBan, y en sólo 7 años ha llegado a inversores internacionales.

3. Housfy

Housfy ha supuesto una revolución dentro del mercado inmobiliario. Es una start-up que se dedica a la abanica de pisos pero sin intermediarios, de manera que permite al usuario ahorrarse mucho dinero en comisiones, y además, el usuario paga sólo si finalmente vende el piso. Este julio, Housfy ha conseguido vender hasta 60 pisos en el mes, una media de entre 2 y 3 pisos al día, y una facturación de entre 130.000 y 140.000 euros mensuales. El mes de febrero, Housfy consiguió 1 millón de euros en una ronda de financiación gracias a préstamo participativo compartible, principalmente proveniente de miembros de su accionariado, que ya habían invertido en la ronda del julio anterior. Además, en declaraciones a El Nacional, desde Housfy aseguran que "cerraremos una tercera ronda por valor superior a las dos anteriores antes de que acabe el año".

4. 21 Buttons

Es una start-up catalana fundada por dos ejecutivos de la consultora McKinsey. Se trata de una red social dirigida a los más jóvenes, que sirve para comprar ropa de manera sencilla y cómoda que los usuarios muestran a través de otras redes sociales. En 2017 consiguió 13 millones de euros para impulsar la aplicación móvil, un capital que captó por inversores como Kibo Ventures, JME Venture Capital o Samaipata Ventures. Este año siguen con su proceso de internacionalización, y hace unos meses llegó también al Reino Unido. Actualmente, ya cuenta con operaciones en España, Italia y Reino Unido.

5. Scytl

Scytl nació como empresa en el 2001, pero se empezó a incubar en 1994 en la Universidad Autónoma de Barcelona. Hoy por hoy ya está presente en un gran número de ciudades importantes a nivel mundial, y en el 2017 cerró una ronda de financiación por un valor total de 12 millones de euros, siendo la quinta ronda de financiación que consigue cerrar la empresa. Con todo, ha conseguido un total de 113 millones de dólares de siete inversores que han revalidado su presencia al accionariado de la compañía.

El capital de Scytl está en manos de los fondos Vulcan, Balderton, Nauta, Spinnaker, Sapphire, Vy, Industry y Adams St.

6. Glovo

Es uno de los ejemplos más claros de start-up catalana triunfadora. Quién más quién menos, todo el mundo conoce la aplicación móvil que se encarga de comprar por ti y llevártelo en casa, ya sea la cena, un regalo o la compra del súper, y cada vez incluye más servicios. Aunque ahora parezca una empresa muy consolidada, Glovo nació justo hace tres años, en el 2015, en Barcelona. De entre las diversas rondas de financiación que ha levantado, la última fue este julio, en el que consiguió 115 millones de euros, con participación de la japonesa de comercio electrónico Rakuten –patrocinadora del FC Barcelona- y AmRest –empresa que controla cerca de 1.650 restaurantes de 16 países bajo marcas como KFC, La Tagliatella, Pizza Hut, Starbucks y Burger King-.

7. Peptomyc

Peptomyc es una start-up de biotech barcelonesa que desarrolla productos para erradicar los genes Myc que sostienen las células cancerígenas. En el 2017 cerró una ronda de financiación Serie A por valor de 4,2 millones de euros. La operación ha sido encabezada por Alta Life Sciences Spain y acompañada por Healthequity, en más de varios inversores y business angels que ya habían participado anteriormente en la ronda del 2016. Con esta última ampliación de capital, Peptomyc pretende avanzar en el desarrollo de sus productos bajo los estándares de CMC (Chemical Manufacturing Control) y en la validación de sus estudios sobre un nuevo tipo de terapias peptídiques -que tiene el objetivo de ayudar en el tratamiento de todo tipo de cáncer.

Peptomyc es, en realidad, un spin-off -término que se refiere en una empresa nacida como extensión de una anterior, por separación o división de proyectos- del Instituto de Oncología de la Vall d'Hebron de Barcelona y de la Institución Catalana de Investigación y Estudios Adelantados.