El govern de Sitges ha parado durante un año la concesión de licencias para abrir nuevos apartamentos turísticos a todo el municipio. La Junta de Gobierno ha aprobado la moratoria con el objetivo de hacer un diagnóstico de este tipo de alojamientos al municipio e inspeccionar y sancionar los que sean ilegales. Una medida, sin embargo, que no ha tardado en ser rechazada por el sector, donde la patronal Associació d'Apartaments Turístics de Barcelona (APARTUR) ha advertido que la suspensión de nuevas licencias se traducirá en un "descontrol" de los pisos ilegales.

Por otra parte, el consistorio también ha acordado prohibir la apertura de nuevos establecimientos de alimentación en el casco antiguo, bien sean pequeños supermercados, locales de comida para llevar, churrerías u hornos de pan. Estas medidas entrarán en vigor tan pronto como se publique el boletín oficial de la provincia (BOP) de esta semana. El Ayuntamiento ya prevé que las moratorias vayan acompañadas de la implementación de nuevas medidas de control para regular los pisos turísticos y los establecimientos de alimentación y venta de souvenirs. Por ejemplo, el gobierno trabaja en definir un Plan Especial que regule en qué zonas del municipio se pueden abrir apartamentos turísticos. "No puede ser que ahora pueda haber en cualquier lugar", ha asegurado la concejala de Turismo, Aurora Carbonell, que ha confirmado que durante el último año y medio han detectado un alto número de alojamientos ilegales.

¿Más pisos ilegales que reglamentarios?

Actualmente Sitges cuenta con 1.500 pisos turísticos reglamentarios, y el gobierno no descarta que la cifra de apartamentos ilegales sea superior. "Tenemos que hacer un control exhaustivo y un plan de ordenación", ha explicado Carbonell, remarcando que el gobierno "no tiene nada contra estos pisos". En este sentido, la concejala confía en que el paro de los permisos nuevos facilitará la inspección de aquellos que a día de hoy funcionan fuera del marco legal.

El Plano Especial se sumará al Plan de Usos del Casco Antiguo que el gobierno está definiendo desde hace más de un año y que tiene que servir de marco normativo para equilibrar la actividad turística y el día a día de los vecinos. En este sentido, Carbonell ha justificado la prohibición para crear nuevos establecimientos en esta zona de la vila: "Hasta que no estén concretados los nuevos usos, tenemos que parar la apertura de nuevos negocios". Paralelamente, el gobierno trabaja en la implantación del Plan Estratégico de Turismo, ideado para fomentar el turismo responsable y sostenible. Precisamente, el pasado mes de mayo el municipio obtuvo el certificado internacional 'Biosphere Destination', que otorga el Instituto de Turismo Responsable, organismo vinculado a la UNESCO y socio de la Organización Mundial del Turismo y del Global Sustainable Tourisme Council.

"Un gran error"

Por su parte, el APARTUR que abraza pisos de toda la demarcación, ha definido la suspensión de licencias de Sitges como "un gran error". El presidente de la patronal, Enrique Alcántara, ha lamentado que "es la primera vez que, para combatir la ilegalidad, se cierra la legalidad". En este sentido, ha augurado que el efecto que se conseguirá con la moratoria, lejos de regular el sector, derivará en un "descontrol" de los alojamientos irregulares.

Alcántara ha asegurado que el volumen de apartamentos ilegales en Sitges supera con creces los establecimientos legales, y ha criticado que "casi no se hacen inspecciones". APARTUR garantiza que se ha ofrecido en el Ayuntamiento de Sitges para hacer campañas que contribuyan a legalizar el sector, donde se proponga un acompañamiento en todos los trámites burocráticos para los establecimientos que quieran regularizar su situación. Con todo, la patronal ha explicado que el gobierno no se ha mostrado receptivo para actuar de forma conjunta.

"Queremos hacer todo lo posible para que el sector crezca de forma ordenada y se integre en el municipio, pero nos encontramos con todo lo contrario: no hay opción a la legalidad y, quien quiera alquilar una vivienda, no lo podrá hacer pagando impuestos", ha lamentado Alcántara. De esta manera, el presidente de APARTUR prevé que durante los próximos meses seguirán proliferando los establecimientos ilegales, lo cual considera que hará crecer los precios del alquiler turístico.