La rentabilidad del alquiler en Barcelona cayó al 4,9% durante el primer trimestre del 2018 y lo sitúa así a niveles del segundo trimestre del 2015, cuando entonces era del 4,8%, según el portal Idealista. De hecho, la capital catalana se convirtió en la primera ciudad donde la rentabilidad empezó a bajar, una tendencia que ha seguido Madrid al cabo de seis meses, hasta el 5,5%. Barcelona alcanzó su máximo al tercer trimestre del 2016, cuando el índice se situó al 5,7% y desde entonces empezó el descenso hasta el 4,9% actual.

En las otras capitales catalanas, la máxima rentabilidad durante los primeros tres meses del 2018 se alcanzó en Lleida, con un 7,3%, cuatro décimo menos que el último trimestre del año pasado. Aun así, el máximo lo marcó durante el tercer trimestre del 2015. Por su parte, Girona ha alcanzado su máximo, con un 6,7%, durante los tres primeros meses del año mientras que en Tarragona la rentabilidad fue del 5,7%, tres décimas menos que su máximo, alcanzado el cuarto trimestre del 2017 (+6%).

El informe de Idealista, que estudia la evolución trimestral de la rentabilidad de la vivienda desde el 2013 en todas las capitales del Estado, concluye que la media española ha vuelto a marcar un nuevo máximo histórico –con uno 7,8%- pero que la tendencia a las dos grandes capitales –Barcelona y Madrid- es a la baja. Según el jefe de estudios de Idealista, Fernando Encinar, los mercados de Barcelona y Madrid "marcan tendencia y nos dan una idea de cabeza donde se dirigen el resto de mercados a medio plazo".