El índice de precios al consumo (IPC) cayó en abril un 0,7% a Catalunya en comparación con el mismo mes del 2019, un descenso que deja este indicador desde que ha empezado el año en tasas negativas (-1,2%) en relación al mismo periodo de 2019.

En el conjunto de España, los precios también cayeron en abril un 0,7% en comparación con el mismo mes del 2019, el que supone el primer terreno negativo de este indicador desde agosto de 2016, provocado por el abaratamiento de los carburantes y a pesar del fuerte repunte de los alimentos frescos. En la comparativa respecto del mes de marzo, los precios aumentaron un 0,3% a Catalunya, al mismo nivel que en toda España, de acuerdo con los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

De esta manera, Catalunya se sitúa en el mismo valor que la media nacional, mientras que la caída interanual de los precios fue más intensa en otras comunidades, como Aragón y Castilla-La Mancha, con un -1,2%.

Los precios que más subieron en abril, y con diferencia, fueron los de la moda y el calzado, con un repunte del 10,3% con respecto a marzo, seguidos a gran distancia por los de los alimentos y bebidas no alcohólicas, que lo hicieron un 1,5%. Por el contrario, los precios que más bajaron fueron los del transporte, que se redujeron un 3,5% con respecto al mes anterior, y los de la vivienda, que cayeron un 1,7%.

El INE ha explicado que la declaración del estado de alarma ha provocado una situación "inédita" en la producción del IPC del mes de abril, ya que es la primera vez que una parte considerable de los bienes y servicios de consumo no están disponibles por adquisición o sólo lo están a través de la web. En eso hay que añadir que la recogida de los precios se ha tenido que realizar íntegramente por métodos telemáticos, de manera que para el cálculo del IPC de abril se han tenido que estimar el 30% de los precios a nivel nacional.

Provincias

Por provincias, Girona y Tarragona experimentaron una caída de la inflación en abril con respecto a marzo de dos décimas, mientras que los precios subieron cinco décimas a Barcelona y se mantuvieron en Lleida.

Con respecto a la tasa interanual, esta experimentó la caída más en Tarragona, con un -1,5%, seguimiento por Girona (-1,3%) y Lleida (-1%), mientras que el descenso fue más suave en Barcelona, con un retroceso del -0,5%.