El Consejo de Trabajo Económico y Social de Catalunya (CTESC) apunta que puede haber recorrido para "una mejora salarial no inflacionaria" en el mercado laboral catalán, a raíz de la "previsible" disminución de los costes laborales unitarios. Esta es una de las conclusiones principales de la Memoria Socioeconómica y Laboral de Catalunya 2016, que el presidente del CTESC, Luís Franco, y la consellera de Assumptes Socials, Treball i Família, Dolors Bassa, han presentado este viernes por la mañana.

Más concretamente, el Consejo señala que la productividad de los trabajadores ha sido superior a la "muy modesta" evolución de los costes laborales, que "prácticamente no ha aumentado en términos mensuales y lo ha hecho en el 0,5% en términos de coste por hora efectivamente trabajada".

En cuanto a la ocupación, se destaca que en el 2016 ha sido el año que ha registrado el mayor incremento de población ocupada de los últimos tres ejercicios de crecimiento consecutivos.

Trabajo a tiempo parcial

La Memoria del Consejo de Trabajo Económico y Social de Catalunya constata que la tasa de trabajo a tiempo parcial se mantiene bastante por encima de la que existía en el 2008 y que ha reputado durante el 2016, en contraste con el descenso experimentado en el 2015. El Consejo señala que la mayoría de trabajadores a tiempo parcial lo son de forma "involuntaria" y preferirían trabajar más horas.

"Es destacable el crecimiento del número de personas ocupadas con contratos temporales", destaca el informe que recoge que la mitad del nuevo empleo creado durante el 2016 ha sido a través de un contrato temporal. La tasa de temporalidad, que ha seguido una tendencia a la baja durante buena parte de la crisis, está pespunteando desde 2013 y durante el 2016 se ha vuelto a situar a niveles próximos al 2008, primer año de la crisis económica.

Políticas de empleo

La Memoria también destaca que se ha reducido el peso de los hogares con todos los miembros activos en paro, pero al mismo tiempo disminuye el número de personas beneficiarias de prestaciones por desempleo. En este contexto, el presidente del CTESC ha reclamado que las administraciones sigan apostando por destinar recursos a las políticas de fomento del empleo.

El CTESC denuncia que los indicadores de riesgo de pobreza y exclusión social en Catalunya "son todavía elevados" y, en este sentido, valora positivamente la firma del acuerdo para poner en marcha a partir de septiembre una renta garantizada de ciudadanía. El Consejo afirma que la RGC puede contribuir a reducir la pobreza y a la inclusión social y recuerda que la iniciativa tendrá un coste de entre 500 y 600 millones de euros para los presupuestos públicos.

"Tolerancia cero con el paro"

En su intervención, Bassa ha puesto de relieve "la evolución positiva de la economía catalana", que tiene una tendencia de crecimiento del 2,9% de cara al 2017. Dentro de este aumento de ocupación, ha querido destacar el papel de las empresas de economía social, que han generado 185.000 nuevos puestos de trabajo, y ha insistido en que tiene que haber "tolerancia cero con el paro".

A pesar de la mejora de los datos cuantitativos, ha admitido que "faltan datos cualitativos", ya que "el 70% de las nuevas contrataciones han sido por menos de un mes". También ha anunciado que la Renta Garantía de Ciudadanía, que se tiene que aprobar el próximo martes en el Parlamento, será una herramienta importante para reducir la pobreza.