La jueza titular del juzgado mercantil 8 de Barcelona tendrá que decidir cómo acaba la disputa entre los hermanos Font por|para el futuro de Bon Preu. Josep Font, vicepresidente de la cadena de supermercados, quiere que su hermano, Joan, presidente del negocio, compre su parte por 530 millones de euros. Joan Font, en cambio, apela al hecho de que la cantidad es inasumible y se muestra partidario de dividirse los activos del negocio.

El juzgado mercantil 8 de Barcelona ha acogido este miércoles por la mañana el juicio por la separación de Bon Preu. Los dos hermanos han llegado pocos minutos antes, acompañados por sus abogados, a la vista y sin querer hacer ninguna declaración al respecto ante los medios de comunicación. Tampoco durante la vista han declarado, ya que sus letrados se han mostrado partidarios a no tomarles declaración.

El juicio ha durado poco más de una hora y, fuera de la intervención de los letrados y de la magistrada Marta Cervera, sólo ha intervenido un testigo. Se ha tratado de un perito, citado por Josep Font, quien ha intentado explicar las razones por las cuales las diferentes auditorías que se han hecho de la empresa muestran precios tan variados a la hora de cuantificar su valor.

Concretamente se han realizado cuatro, dos de ellas desde cada una de las partes, y con resultados tan opuestos que han oscilado entre los 1.100 y los 380 millones de euros. Según el perito la auditoría más real era la que valoraba Bon Preu en 1100 millones de euros.

Por esta razón la parte demandante, Josep Font, solicita a su hermano a Joan 530 millones de euros por su parte de Bon Preu, con los correspondientes intereses y que asuma los costes del proceso. El vicepresidente de Bon Preu pidió a su hermano que le comprara su parte del negocio a finales de 2017.

Por su parte, Joan Font, se niega a aceptar esta suma la cual su letrado ha llegado ha asegurado que sería "inasumible" y que supondría el final de la empresa. La defensa apela al hecho que lo que se tendría que hacer es dividir los activos inmobiliarios, el dinero y el negocio, tal como apunta, ha explicado el letrado, los estatutos de la empresa en casos de separación.

Ante las posiciones enfrentadas tendrá que ser la magistrada quien decida qué pasa con el futuro de Bon Preu.