La Generalitat reducirá a la mitad los alquileres de los locales comerciales cerrados forzosamente por la pandemia al 50% en caso de que arrendatario y propietario no se pongan de acuerdo en otras modificaciones. El decreto que el Ejecutivo catalán aprobará este martes en el consejo prevé que los inquilinos puedan pedir cambios "razonables" en las condiciones del contrato pero que, si no hay acuerdo a través de la negociación, se fuerce la reducción al 50% del alquiler mientras dure la suspensión total de la actividad o la reducción proporcional en caso de restricciones parciales.

Para dar cobertura legal a la reducción, el decreto prevé que en dos años el Govern incluya la cláusula rebus sic stanitibus al ordenamiento jurídico.
Según han confirmado fuentes de Ejecutivo catalán a la ACN, el decreto para la reducción de los alquileres priorizará que haya acuerdos entre inquilinos y propietarios, pero preverá la reducción al 50% si es imposible la vía negociada en el plazo de un mes.

Regulación para renegociar contratos de alquiler

La reducción es del 50% en caso de cierre total por medidas de suspensión de la actividad decretadas por las autoridades, y en una proporción igual a la mitad de la pérdida de aprovechamiento del inmueble si hay reducciones de horarios o otras limitaciones. De acuerdo con las fuentes consultadas, el hecho de que el restaurante en cuestión ofrezca servicios de entrega a domicilio o recogida no afectará a la posibilidad de exigir la reducción al 50% del precio del alquiler.

Para dar cobertura legal a la medida, el Govern aprobará en el plazo máximo de dos años un nuevo proyecto de ley para incorporar al ordenamiento jurídico la cláusula rebus, que permite establecer la regulación necesaria para que se pueda renegociar un contrato en caso de "cambios imprevistos de circunstancias". La norma se deberá promover desde el código civil.

Ayudas de 40 millones de euros

Fuentes de la Generalitat admiten que la normativa podría ser recorrida por el gobierno español en el Tribunal Constitucional. De hecho, la consideran necesaria teniendo en cuenta la dramática situación económica del sector de la restauración. El Gremio de Restauración pidió al Govern que la reducción fuera del 75% y mostró sus dudas sobre la cláusula rebus y los problemas derivados de la falta de acuerdo entre propietarios e inquilinos.

La reducción al 50% del alquiler se sumará al paquete de ayudas de 40 millones de euros que ofrecerá el Govern a la restauración y los centros de belleza que han tenido que cerrar. Según cálculos del Ejecutivo, se podrían recibir hasta 1.500 euros por negocio para compensar los 15 días decretados de cierre y cubrir gastos como el alquiler o los suministros. El dinero no se otorgará hasta el cierre de la partida presupuestaria.

Según la patronal de pequeñas y medianas empresas, Pimec, los 40 millones de las ayudas del Govern se quedan muy lejos de lo que necesita actualmente el sector. Según la organización, la medida restrictiva va a provocar que las empresas afectadas dejen de ingresar 780 millones de euros en los 15 días de cierre. “Se podría haber evitado cerrar con mensajes de concienciación. Además, las ayudas anunciadas solo cubren un 5,1% de lo que se va a dejar de ingresar”, indicaba la pasada semana el presidente de la organización, Josep González i Sala.

 

Imagen principal: Una persona permanece quieta delante de un restaurante La Sureña en una calle de Barcelona, Catalunya. Europa Press