Endesa ha cerrado el primer trimestre del año con 844 millones de euros de beneficio neto. Esta cifra supone más del doble del beneficio del mismo periodo del 2019 (363 millones), con un incremento del 133%. Según la compañía, los buenos resultados responden a la gestión del mercado liberalizado, así como a la estabilidad del mercado regulado.

También tiene que ver el impacto de la entrada en vigor del nuevo convenio colectivo y el registro de determinadas provisiones por reestructuración de plantilla, que han generado un impacto positivo de 267 millones en el resultado neto. Sin tener en cuenta estos efectos extraordinarios el incremento del beneficio neto ha sido del 59%.

Endesa apunta que la demanda acumulada de energía eléctrica en la península ha caído un 3,2% en este primer trimestre con respecto al 2019. La compañía cree que la situación se ha visto agravada por la declaración del estado de alarma por el coronavirus, que ha reducido "de manera significativa" la demanda durante la segunda quincena de marzo, aunque admiten que no ha tenido un impacto significativo en los resultados del primer trimestre.

Afrontar el impacto del virus

El consejero delegado de Endesa, José Bogas, destaca que estos "buenos resultados" del primer trimestre sirvieron al grupo "para lindar con garantías el impacto del coronavirus durante el segundo trimestre". "La compañía ya ha puesto en marcha de nuevo todos los trabajos de construcción de parques renovables, y estamos plenamente comprometidos con las inversiones previstas en nuestro plan estratégico. Estamos estudiando, incluso, la posibilidad de acelerar este plan, especialmente en plantas eólicas y solares, para poder ayudar a la reactivación de la economía con la creación de empleo y la generación de riqueza", ha añadido.

Con respecto al mercado liberalizado, Endesa incrementó el Ebitda de este negocio en 185 millones de euros, un 51%, hasta situarlo en los 550 millones de euros.

Mientras tanto, el margen bruto de este negocio creció un 25%, hasta llegar a los 850 millones de euros, a causa, fundamentalmente, del buen comportamiento del margen del negocio eléctrico, que aumentó un 20% gracias a la gestión integrada del negocio en un entorno de mercado marcado por la menor demanda y la caída de los precios, así como a la fortaleza del margen en el negocio de gas (+ 117%) y a la división Endesa X, que aportó 34 millones de euros, con un incremento del 23%.

La demanda acumulada peninsular de energía eléctrica cayó un 3,2% hasta marzo, enfrente del primer trimestre del 2019 (-2,8% corregidos los efectos de laboralidad y temperatura), mientras que en los territorios no peninsulares el descenso fue del 5% en las Islas Baleares y del 1,4% en las Islas Canarias (-3,2% y -1%, respectivamente, corregidos, los efectos de laboralidad y temperatura).

Endesa señala que esta situación se vio agravada por la declaración del estado de alarma, que redujo la demanda de manera significativa durante la segunda quincena de marzo, aunque subraya que el efecto provocado por la pandemia "no ha tenido un impacto significativo en sus resultados del primer trimestre".