El informe que publicó ayer el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre las perspectivas económicas mundiales ante la crisis del coronavirus no ha dejado a nadie indiferente. España es uno de los países que ha salido peor parado después de Italia, ya que el FMI prevé que el PIB español se contraiga un 8% en el 2020, y alcance un paro del 20,8%.

Las cifras que da el Fondo prevén la peor crisis global desde la Gran Depresión de los años 30, y a nivel europeo, son cifras no vistas en el continente desde la Según Guerra Mundial. Así pues, el devastador informe ha sido el protagonista de la mayoría de portadas de diarios y de editoriales y también se ha reflejado con bajadas a la bolsa española a pesar de la respuesta del Ejecutivo de Sánchez, que menosprecia estas cifras y tilda el informe de "demasiado precoz". También ha sido el tema a comentar por varios políticos y economistas conocidos, como el profesor Santiago Niño Becerra, quién asevera en un hilo de Twitter que "la economía española ha tirado una década y es más débil que en el 2009", durante la crisis financiera.

Según el economista, "las cifras del FMI son más que malas pero no peores que las que la economía española mostró en el 2009". ¿Entonces? Hay que tener en cuenta que entonces la deuda era del 52% y hoy es del 96%. Así pues, según Becerra, lo que dicen las cifras es que "1) la economía española ha tirado por la ventana una década porque hoy es más débil que en el 2009" y "2) los déficits son similares porque España no ha podido resolver su problema crónico de falta de ingresos públicos, después tendrá que recortar gastos y se le tirará encima una catarata de deuda".

De esta manera, según explica el profesor "el impacto del virus es y será terrible, pero España, en proporción, está peor porque su estructura de PIB es más débil y más dependiente". De hecho, explica Becerra, el PIB español está muy centrado en el turismo, el comercio interior y el automovilismo, unos sectores muy tocados por la crisis del coronavirus.