La desigualdad de género en el trabajo es, todavía ahora, una realidad. Aunque se ha conseguido una pequeña mejora en el porcentaje de mujeres que ocupan sitios de responsabilidad en el estado español, los hombres directivos ganan, por término medio, un 18% más que sus homólogas femeninas. Estas son las conclusiones del 12º informe sobre diferencias salariales y cuota de presencia femenina elaborado por ICSA Grupo y la Escuela de Negocis EADA, que han presentado esta mañana.

Además, las mujeres ocupan uno de cada siete cargos directivos en Cataluña, el 13,8% del total.

El crecimiento económico no comporta una igualdad real

A pesar de la recuperación económica, que llega a un crecimiento del PIB de más del 3% en los últimos tres años, no ha supuesto una mayor presencia femenina en sitios de responsabilidad, como tampoco una reducción considerable de la brecha salarial, según han explicado Indry Canchila, socia responsable del área de consultoría de ICSA grupo y la doctora Aline Masuda, profesora e investigadora de EADA Business School.

Si bien es cierto que la crisis económica ha implicado una menor presencia femenina directiva y una mayor desigualdad salarial, en la coyuntura actual estas dos variables no evolucionan positivamente a los mismos niveles en que lo hace la economía. Vemos pues que si bien es cierto que la cuota femenina ha mejorado en más de 3 puntos respecto del 2016, pasando del 11,8% al 15,4%, no ha llegado a los niveles previos a la crisis, en la que en el 2008 la mujer tenía una cuota de casi el 20%, a nivel estatal.

 

Elaboración propia. Fuente: Informe "Diferencias salariales y cuota de presencia femenina" ICSA.

De hecho, con respecto a la brecha salarial, es de un 18,1% en sitios de directivo y del 14% para los empleados. En cifras absolutas, la retribución media actual de un directivo es de 79.545 euros brutos anuales. En cambio, la de su homóloga femenina es de 68.072 euros el año. Estas cifras se han obtenido a partir de una muestra que recoge datos salariales de más de 80.000 empleados en España a través de encuestas y plataformas.

¿Por qué hacen falta mujeres directivas?

Canchila explica que desde que somos pequeños nos enseñan a asociar trabajos concretos con un género, cosa que acaba llevando a una limitación también personal de las propias mujeres. Por lo tanto, la presencia femenina en sitios directivos es importante porque la imagen que da a los niños aporta un cambio cultural "necesario". Además, de esta manera se crean referentes.

La necesidad de "un cambio de fondo"

Según Canchila, "el sistema comporta a una discriminación implícita, y que no sólo afecta el corto plazo, sino a medio y largo plazo". "La desigualdad salarial también afecta a las pensiones donde también vemos el resultado de estas desigualdades. Hace falta un cambio de fondo". Canchila ha querido recordar las movilizaciones de este 1 de mayo en que una de las reivindicaciones claras fue la igualdad: "ahora más que nunca tenemos que aplicar cambios reales en las organizaciones empresariales".

Una de las necesidades más urgentes es un cambio en el "diseño de los puestos de trabajo del siglo XXI". Según Aline Masuda, se tienen que crear puestos de trabajo en qué todo el mundo, tanto hombres como mujeres, puedas y quieran acceder. Masuda destaca el hecho de que a menudo las mujeres no quieren coger ciertos sitios de trabajo porque saben que difícilmente podrán conciliar el trabajo y la familia.

Canchila explica que en el momento en que una mujer decide ser madre, su carrera profesional se estanca "como mínimo durante 3 años". Hace falta, pues, que las empresas hagan políticas que nos ayuden a conciliar al hecho de ser madres con el trabajo, pero también el hecho de ser padres. "También hay que reivindicar el papel de los padres".