Que Valentino Rossi y Marc Márquez no mantienen, digamos, una estrecha amistad es conocido por todo el mundo. Pero su enemistad ha traspasado los circuitos y sigue dejando algunos remanentes a su paso. Il dottore es un auténtico ídolo de masas en Italia, y tiene una gran influencia en su país, donde, por otra parte, hay una gran cantidad de pilotos en la parrilla. De hecho, el de Urbino, tiene una Academia donde forma a los futuros pilotos, además de poseer un equipo en la categoría reina, donde también recibe las motos de Ducati.
Con todo ello, y sumándole el fichaje del '93' por Gresini, también bajo el paraguas de los de Borgo Panigale, se ha generado un caldo de cultivo por parte de la afición italiana contra el ilerdense, después de conocerse su llegada al equipo de Faenza. Se pudo ver en la fiesta de clausura de Ducati, Campioni in Festa, donde se abucheó el nombre de Marc Márquez cuando el presentador del acto preguntó a Pecco Bagnaia sobre él. Y todo, como dijo Paolo Campinoti, dueño del Pramac Racing, porque "para bien o para mal en el mundo Ducati hay muchos pilotos de la VR46 de Rossi y digamos que la familia Márquez no está bien vista. Todavía va a haber más lío en el lío".
Rossi quiere evitar el salto de Márquez a la Ducati oficial
A pesar de no ser rivales directos, después del retiro de la leyenda italiana, la presencia de il dottore en los circuitos sigue siendo motivo de disputa. Rossi es consciente que con Marc en Ducati, aunque sea la satélite de Gresini, tiene muchas papeletas de conquistar un nuevo campeonato, con lo cual perdería su posición de ventaja respecto a él. Recordemos que el italiano está por delante del '93' en cuanto a títulos, y lo aventaja en un entorchado de la categoría reina.
Por lo tanto, un nuevo mundial de Márquez supondría que el '46' perdería su ventaja respecto a su archienemigo. Además, el ilerdense lo haría con la Ducati, marca con la cual Valentino no fue capaz de conseguir nada. Una combinación explosiva que atacaría directamente al orgullo de Rossi, que no quiere darle cancha a su más acérrimo rival.
Bezzecchi y Martín, sus grandes aliados
Por esa misma razón, y consciente de que un título en 2024 para Marc, supondría, también, dar el salto al equipo oficial, il dottore está moviendo todos los hilos posibles para evitarlo. Con Márquez en Ducati Corse, Rossi sabe que el '93' podrá conseguir mucho más mundiales y, por eso, desde su posición privilegiada hará todo lo que esté en su mano, y lo que no también, para que ese salto no se produzca.
Así pues, el de Urbino propondrá a su piloto fetiche, Marco Bezzecchi para que sea el compañero de Pecco Bagnaia. El italiano deberá luchar con Jorge Martín, que ya ha amenazado con abandonar la factoría si no da el salto a la fábrica oficial. A todo ello se encomienda Valentino para evitar que el ilerdense siga creciendo, aunque sospecha que está todo pactado, y si no ficha por Ducati, dejará Gresini.