Muchos gallos en un solo gallinero. En el Santiago Bernabéu ya se podían imaginar que tarde o temprano surgirían problemas en la medular. Luka Modric, Toni Kroos y Carlos Casemiro han sido los titulares durante la última década y no admiten dejar de serlo justo cuando vienen de una temporada en que lo han ganado todo.

Sea como sea, Fede Valverde ya hace tres temporadas que viene esperando su turno, y aunque juega bastantes minutos, 'el Pajarito' considera que ya merece un puesto en el once. Con respecto a Eduardo Camavinga, todavía es joven y acepta el rol de suplente, pero lejos de esta voluntad está Aurélien Tchouaméni.

Aurélien Tchouaméni Real Madrid / Foto: EFE
Aurélien Tchouaméni, durante un partido de pretemporada con el Real Madrid / Foto: EFE

Tchouaméni llega al Real Madrid pisando fuerte

No solamente se trata de que el ex del Mónaco quiera ser titular, sino que los 80 millones que Florentino Pérez pagó por él pesan mucho. Un traspaso que podría superar en cantidad a la compra de Cristiano Ronaldo en verano de 2009 ejerce demasiada presión para tenerlo sentado en el banquillo. El Real Madrid ya ha estado en el centro de todas las críticas por culpa de casos como el de Eden Hazard o el de Luka Jovic, y por esta razón, quiere que Tchouaméni empiece con buen pie su nueva etapa como futbolista merengue.

De hecho, el francés lo está haciendo y durante la madrugada de este domingo ha hecho un gran partido contra la Juventus de Turín. El de Rouen llega al Santiago Bernabéu pisando fuerte y Carlos Casemiro quiere que recule. El brasileño no concibe dejar de ser el pivote titular y sabe que, por mucho que pueda seguir siéndolo, la llegada de Tchouaméni significa asegurar el medio del campo cuando Casemiro no esté.

Carlos Casemiro entrenamiento Real Madrid / Foto: EFE
Carlos Casemiro, durante un entrenamiento con el Real Madrid / Foto: EFE

Casemiro, saldrá del Real Madrid más temprano que tarde

Su salida del Madrid, sin embargo, puede llegar antes de lo esperado, porque tiene ofertas del Paris Saint-Germain, y si no es este verano, se marchará el próximo cuando el gigante francés pueda aspirar a un traspaso más barato para el ex del Oporto. Sin embargo, si Nasser Al-Khelaïfi considera que tiene que invertir, el presidente catarí no tendrá problemas al rascarse el bolsillo.

La prioridad del Paris Saint-Germain es alcanzar ser una plantilla no solo de estrellas, sino lo máxima competitiva posible. En este sentido, el director de fútbol del PSG, Luís Campos, quiere librarse de algunos futbolistas con más ego que capacidad de competición para hacer hueco a otros acostumbrados a hacerlo. Un Casemiro que ha conquistado cinco veces la Champions League es considerado el refuerzo clave con el fin de catapultar una plantilla llena de estrellas hasta el Olimpo del fútbol europeo.