El Barça estuvo buscando desesperadamente refuerzos para la parcela ofensiva, para satisfacer las pretensiones de Hans-Dieter Flick. Había exigido la llegada de un nuevo atacante, y Joan Laporta y Deco trabajaron en poder reclutar a Nico Williams, que era el elegido en la secretaría técnica. Pero tuvieron que aceptar el fracaso cuando se conoció que había optado por ampliar su compromiso con el Athletic Club de Bilbao, hasta el lejano 2035.
Una historia similar se vivió con Luís Díaz, quien era la principal alternativa. En el Camp Nou no podían pagar los más de 70 millones de euros que reclamaba el Liverpool, y acabó recalando en las filas del Bayern de Múnich. Y antes que apostar por Marcus Rashford, que fue una petición de ‘Hansi’, en la directiva azulgrana tantearon otra opción, que resultaba más convincente, y que pensaban que también podría llegar en unas condiciones muy favorables.
Porque habían estado muy atentos a la situación de Savio Moreira, por el cual ya mostraron un enorme interés el año anterior. Quedaron impresionados con las actuaciones que completó durante su periplo en La Liga EA Sports, y fue uno de los responsables de la histórica campaña que completó el Girona, que logró clasificarse a la Champions League por primera vez. Y el internacional brasileño fue la gran referencia ofensiva de los de Michel Sánchez.

Una cosa que le sirvió para que entidades de la magnitud del Real Madrid, del Chelsea, del Arsenal o del Borussia Dortmund intentaran firmarlo, aunque acabó llegando al Manchester City. Allí tuvo un inicio muy esperanzador, y comenzó dejando buenas sensaciones en sus primeros partidos. Pero las lesiones y la feroz competencia que existe en su demarcación provocaron que perdiera mucho protagonismo, y acabara viéndose relegado a la suplencia.
No se acabó de adaptar a los sistemas de Pep Guardiola, y tampoco ayudó la crisis deportiva del equipo ‘skyblue’, que completó su peor temporada en muchos años, sin conquistar ningún título. Una oportunidad que el Barça quería aprovechar para pedir la cesión del crack nacido en el año 2004.
Guardiola fue quien pidió a Hugo Viana que no negociara con el Barça
Deco contactó personalmente con Hugo Viana, el nuevo director deportivo del City, que ha sustituido a Txiki Begiristain. Pero Guardiola estaba convencido de que este año, Savinho podría acabar de mostrar su verdadero potencial en la Premier League.

Así que Pep pidió que no negociaran con el Barça, ni tampoco con el Tottenham Hotspur, que era el otro gran admirador del ex del PSV Eindhoven, del Troyes o del Atlético Mineiro.