Pau Víctor fue uno de los tres jugadores del primer equipo del Barça que no fue convocado por Hansi Flick para la gira asiática de pretemporada. El delantero de 23 años se quedó en Barcelona para resolver su futuro y no ha tardado en hacerlo. Este viernes, el club anunció su traspaso al Sporting de Braga por unos 12 millones de euros. La operación en cuestión reportará un ingreso económico también para el Girona, ya que tenía un porcentaje de una futura venta del de Sant Cugat del Vallés.
Pau Víctor pone rumbo a Portugal...
La temporada pasada, bajo las órdenes de Hansi Flick, Pau Víctor tuvo un rol residual en el Barça y este año, con la llegada de Marcus Rashford y la apuesta del club por el joven extremo sueco Roony Bardghji, se había quedado sin espacio en el ataque del conjunto blaugrana. Pretendido por varios equipos de LaLiga, el delantero de Sant Cugat del Vallés ha decidido continuar su carrera en Portugal, más concretamente, en el Sporting de Braga, que pagará 12 millones por él.
De los 12 millones de euros fijos que el Braga pagará por Pau Víctor, el Barça recibirá el 70%, 8,4 millones de euros, a los que se podrían añadir tres millones más de variables si se terminan por cumplir. El 30% restante, 3,6 millones, serán para el Girona. Y es que el club de Montilivi pactó con el Barça llevarse el 50% de su venta si esta se producía durante el mercado de invierno, mientras que el tanto por ciento se reducía al 30% si el delantero abandonaba la entidad culé en el mercado de verano, como así ha sido.
... Y genera fair play para el Barça
Por otro lado, la venta de Pau Víctor al Sporting de Braga también tiene una lectura clave desde el punto de vista económico y del control financiero de LaLiga. A los 8,4 millones que ingresará el Barça por su traspaso hay que sumar el ahorro salarial. Pese a que su ficha no era, ni de largo, una de las más elevadas del primer equipo blaugrana, representaba un coste neto para el club. Así pues, su salida libera una parte del límite salarial que, sumada al ingreso neto del traspaso, eleva el beneficio total en términos de fair play hasta los 8 millones de euros, tal y como explica el Sport.
En definitiva, se trata de una gran operación del Barça, que firmó al delantero por 2,7 millones de euros y solo un año más tarde lo ha vendido por un precio cinco veces superior. La salida de Pau Víctor se suma así a las ya confirmadas de Pablo Torre (5 millones por el 50% al Mallorca) y Ansu Fati (cedido al Mónaco), las cuales han liberado espacio y masa salarial en el Barça. Ahora, el club sigue trabajando en la operación salida con las carpetas de Oriol Romeu e Iñaki Peña sobre la mesa.