Neymar volvió al Santos para vivir noches como la de este pasado lunes. El conjunto alvinegro ni mucho menos atraviesa el mejor momento de su historia reciente. Es 15.º en el Brasileirao y en esta última jornada hacía frente a un partido clave para alejarse del descenso.
Recibía al Juventude (19.º) en el estadio Morumbis de São Paulo en un enfrentamiento de importancia capital para los intereses colectivos del Santos, pero también de manera particular para Neymar. Carlo Ancelotti iba a tener ojos en las gradas del feudo peixe con las presencias de Rodrigo Caetano, coordinador ejecutivo de la selección brasileña, y Juan, el gerente técnico.
Neymar brilla y se postula como opción para Ancelotti
Los emisarios de la Canarinha iban a atender el partido entre el Santos y el Juventude, presumiblemente, para seguir el partido de Neymar. Como es evidente, Carlo Ancelotti no las tiene todas con respecto a las condiciones físicas del máximo goleador histórico brasileño, pero este lunes, que Neymar no estaba lesionado y tenía un compromiso muy importante con su equipo, era el día indicado para que se luciera. Y así lo hizo.
El Santos se quedó con los tres puntos (3-1) gracias con un doblete de Neymar y un gol de Álvaro Barreal en que el astro carioca también participó. Fue el capitán local quien se encargó de abrir el marcador en el minuto 37 y quien estableció el 3-1 definitivo desde el punto de penalti (80'), echándose así a la espalda un equipo que esperaba otorgar su timón a Neymar desde su llegada a Brasil el pasado mes de enero.
No obstante, la grata noticia para los seguidores del Santos, así como para Rodrigo Caetano, Juan, Ancelotti y, en definitiva, la selección brasileña, no fue solo el doblete del icono, sino su buena actuación con respecto a la actitud y al despliegue físico. Neymar se mostró participativo y asumió la batuta del ataque de los suyos, tal como hacía en sus días en el PSG o en el Barça, junto con Suárez y Messi. Todo, sin olvidarse de unas obligaciones defensivas que se presentan como indispensables en su juego si de verdad pretende volver a ser convocado con la selección nacional.
Neymar, objetivo septiembre
Ya en el mes de agosto, Neymar necesitaba cuajar una actuación como la de este lunes para, como mínimo, recordar a Ancelotti que el crack que lleva dentro sigue vivo. Y es que, de cara al mes de septiembre, el técnico de Reggiolo debuta al frente de la canarinha con los partidos clasificatorios para el Mundial. Con la selección del Brasil matemáticamente ya clasificada, Neymar tiene un importante filón para volver a enfundarse la camiseta verdeamarela porque, además, los de Ancelotti se verán las caras contra Chile y Bolivia, que son la última y antepenúltima clasificada, respectivamente, en la clasificación de eliminatorias de Copa del Mundo de Sudamérica.