Los grandes deportistas se forjan a través de la valentía y la superación y Miguel Ángel López es un claro ejemplo de estas virtudes. El colombiano acaba de ganar la Volta a Catalunya después de un final épico entre Yates, Bernal y Quintana.
Se ha demostrado que López es un ciclista con mucha calidad y potencia, que ha sabido dosificarse y saber cuándo atacar a sus rivales. Con esta edición de la Volta, la 99ª, Catalunya ha podido conocer de primera mano este corredor del equipo Astana, que hace unos años su historia podría haber acabado en tragedia.
Apuñalado en dos ocasiones
Corría el año 2011 cuando Miguel Ángel López soñaba con ser ciclista profesional. El colombiano entrenaba horas y horas en la bicicleta que le había regalado su padre para prepararse para el Tour de l'Avenir, la competición junior más importante, cuando, de repente, dos atracadores lo sorprendieron. La respuesta de López fue combatirlos y resistirse y fue entonces cuando recibió dos puñaladas en la pierna.
EFE
El colombiano fue muy hábil y pudo sacar el cuchillo a los atracadores y pudo huir. Cuando la noticia salió a la luz, los medios de comunicación locales empezaron a ponerle el apodo de Superman por su valentía durante este suceso.
En la rueda de prensa posterior a la Volta, López ha recordado este incidente: "No me iba a dejar sacar la bicicleta después del esfuerzo que había hecho mi familia por conseguirla". El corredor de Astana ha añadido que el camino a seguir es este y se ha podido comprobar el potencial del ciclismo colombiano con nombres como el suyo, el de Nairo Quintana y Egan Bernal.